No utilizar cobertura facial puede causar multas y sanciones
La Asociación Internacional de Transporte Aéreo remarcó la importancia de utilizar protectores para resguardar la salud de pasajeros y tripulantes.
De acuerdo a las recomendaciones que brindó la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) junto con la Organización Mundial de la Salud (OMS) y los gobiernos de cada país, la utilización del tapabocas es fundamental para cuidar la salud de los pasajeros y tripulantes al momento de viajar en avión.
Ante este panorama, la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) hizo hincapié en la necesidad de que los pasajeros cumplan con los protocolos luego de recibir varios informes y notificaciones recientes de viajeros que directamente se niegan a utilizar una protector facial en los vuelos.
Si bien la mayoría cumple las reglas, algunos incidentes a bordo consideraron que fueron un tanto "violentos", que dejaron como resultado desviaciones costosas y extremadamente inconvenientes para descargar a los pasajeros conflictivos.
"Este es un llamado al sentido común y a la responsabilidad. La gran mayoría de los viajeros comprenden la importancia de cubrirse el rostro tanto para ellos como para sus compañeros de viaje, y las aerolíneas aprecian este esfuerzo colectivo. Pero una pequeña minoría crea problemas. La seguridad es el núcleo de la aviación y el cumplimiento de las instrucciones de la tripulación es la ley. El incumplimiento puede poner en peligro la seguridad de un vuelo, interrumpir la experiencia de viaje de otros pasajeros y afectar el entorno de trabajo de la tripulación", afirmó Alexandre de Juniac, director general y CEO de IATA.
Requisitos aéreos
Un boleto de avión es un contrato en el que un pasajero acepta los términos y condiciones de transporte de la aerolínea. Entre las disposiciones que pueden estar incluidas en ese convenio, cada compañía aérea tiene la potestad de negarse a transportar a una persona cuyo comportamiento interfiera en un vuelvo, viole las regulaciones gubernamentales o simplemente haga que otros pasajeros se sientan inseguros.
El hecho de infringir en las reglas significa que un pasajero corre el riesgo de ser expulsado de un viaje, con posibles restricciones para volar a futuro o bien ser sancionado en virtud de las leyes nacionales.
Según distintas evaluaciones que hizo la Universidad de Edimburgo, cubrirse la cara correctamente con distintos protectores puede reducir hasta un 90% la propagación del virus.
"Las investigaciones que hemos visto hasta la fecha, y nuestras propias investigaciones con las aerolíneas del mundo, nos dicen que el riesgo de contraer COVID-19 en un vuelo sigue siendo muy bajo. Parece haber una serie de factores que apoyan eso. La alta tasa de flujo de aire de la cabina de arriba a abajo, el filtrado constante de aire a través de filtros HEPA de última generación, el hecho de que todos los asientos miran en la misma dirección y, por supuesto, el uso de una cubierta facial y la desinfección de la aeronave todo juega una parte", sostuvo el doctor David Powell, asesor médico de IATA.
"No se trata solo de cuidarse. Se trata de proteger a todos los demás en el vuelo", concluyó.