Aeroméxico y ASA por los vuelos verdes
Aeroméxico la aerolínea insignia del país en coordinación con Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) refrendan el compromiso del sector aéreo mexicano con la protección del medio ambiente al participar en un histórico vuelo con bioturbosina en el marco de la Conferencia de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sustentable, también conocida como Río+20 a celebrarse en Río de Janeiro, Brasil.
La Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), en conjunto con la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), Grupo de Acción del Transporte Aéreo (ATAG), diversas aerolíneas y proveedores de biocombustible, realizarán una serie de vuelos que partirán de la Ciudad de Montreal, Canadá con destino a Río de Janeiro, Brasil, lugar donde se celebrará una de las reuniones mundiales más importantes sobre desarrollo sostenible de nuestro tiempo que reunirá a gobiernos, instituciones internacionales y principales grupos comprometidos con esta causa.
Este histórico vuelo contará con cuatro tramos interconectados: Montreal- Toronto-Ciudad de México- Sao Paulo y finalmente Río de Janeiro, todos efectuados con biocombustibles sustentables de aviación. Aeroméxico realizará el tercer tramo en un Boeing 777-200 cargado con 27 mil litros de biocombustible suministrado por ASA, cubriendo 7,428 kilómetros.
Se trata de un vuelo emblemático en el que participará el Secretario General de la OACI, Mr. Raymond Benjamín, quien estará acompañado por la delegación mexicana encabezada por Guillermo Heredia, Coordinador de Unidades de Negocio de ASA, y Héctor Reyes Muñoz, Subdirector de Calidad y Gobierno Corporativo de Grupo Aeroméxico.
El vuelo que partirá del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México con destino a Sao Paulo, Brasil será alimentado por una mezcla de 50% turbosina derivada del petróleo y 50% Bio-Keroseno Parafínico Sintetizado (Bio-KPS), derivado de aceite recuperado de cocina en su mayoría (88%), Camelina (10%) y Jatropha mexicana (2%).
El uso de aceite recuperado de cocina, en la producción de biocombustible, otorga un doble beneficio para el ambiente. Al tener emisiones de CO2 a lo largo de su ciclo de vida de 65 por ciento hasta 80 por ciento menores respecto de la turbosina derivada del petróleo, su uso previene emitir hasta 25.5 toneladas de CO2. El reprocesamiento evita que su destino final como desperdicio contamine los mantos acuíferos y el suelo.
El biocombustible utilizado se encuentra apegado a la especificación para combustibles de turbina de avión D7566-11 de la Sociedad Americana de Pruebas de Materiales (ASTM, por sus siglas en inglés), la cual permite la utilización del Bio-KPS en una proporción de hasta el 50% en volumen.
Para obtener dicho producto, ASA realizó la recolección de semilla de Jatropha Curcas en territorio Mexicano, y tuvo intercambios comerciales con Honeywell UOP y SkyEnergy B.V.
Por primera vez Aeroméxico implementará tabletas electrónicas en la cabina de mando del Boeing 777-200 mediante las cuales los pilotos tendrán acceso a versiones digitales de los Manuales de Operación remplazando las versiones impresas. Lo anterior disminuirá el peso total del equipo, uso de papel, consumo de combustible y emisión de gases.
Con el éxito del Primer Vuelo Transatlántico en la ruta México-Madrid en agosto del año pasado y el programa de Vuelos Verdes semanales entre la Ciudad de México y San José, Costa Rica, Aeroméxico y ASA vuelven a conjuntar esfuerzos en la promoción, utilización y desarrollo de combustibles alternativos que buscan la reducción de emisiones de CO2 al medio ambiente.
Con este evento, México demuestra una vez más que cuenta con todos los elementos para tener una industria aeronáutica responsable que contribuye a una economía sustentable.