Se acerca el Festival de Música de Cartagena
La ciudad amurallada de Cartagena de Indias se prepara para recibir a más de 100 artistas de todo el mundo, que brindarán 32 conciertos y clases magistrales gratuitas durante la quinta edición del Festival Internacional de Música, entre el 6 y el 15 de enero.
En esta ocasión, el tema central del evento será “la Gloria de Johann Sebastián Bach”, con la intención de rendir un homenaje al grandioso compositor barroco alemán. Y para celebrar su legado, todas las mañanas del festival habrá seis violinistas que interpretarán sus “Partitas para violín solo”. Una de ellas es Jennifer Frautschi, de Estados Unidos, quien anticipó: “este es el repertorio más difícil de interpretar para un violinista, ya que requiere el máximo rigor intelectual”.
Además, el programa para 2011 incluye los “Seis conciertos de Brandenburgo”, la “Misa en Sí Menor”, la “Cantata del Café”, y el “Concierto para piano Nº 4” de Beethoven.
Entre los invitados estarán presentes Stephen Farr, clavecinista, director y concertista del Reino Unido, que dará clases de clavecín; el cuarteto Brentano String Quartet, de Estados Unidos, que dictará clases de música de cámara; las destacadas sopranos Paula Murrihy de Irlanda, Yulia Van Doren y Dawn Upshaw de Estados Unidos, que ensañarán el arte de cantar; y el flautista colombiano Gabriel Ahumada, que dictará clases de flauta. Colombia también se presentará ante el mundo con la canta-autora Marta Gómez, el Guafa Trío y el Ensamble Óctopus.
Los músicos invitados dictarán clases magistrales de piano, violín, flauta y otros instrumentos a jóvenes estudiantes que tendrán el privilegio de recibir asesoría de primer nivel. Estas clases se llevarán a cabo en la Institución Universitaria Bellas Artes y Ciencias de Bolívar.
“Promete ser un festival inolvidable”, comentó Julia Salvi, presidenta de la Fundación Salvi, que organiza el evento, en el que todos los días habrá al menos un concierto gratuito.
Cartagena de Indias, patrimonio histórico de la humanidad y ciudad cultural por excelencia, muestra una vez más por qué en Colombia, el riesgo es que te qu