El ministro de Defensa destacó el plan oficial de radarización para combatir el narcotráfico. "Es preocupación de la Presidenta (Cristina Fernández de Kirchner) intensificar la acción para combatir el delito del narcotráfico", dijo Puricelli, que explicó que en ese marco es que se busca "controlar y vigilar el espacio aéreo argentino".
En una entrevista con radio Diez, Puricelli dejó en claro que "lo único que hacen las Fuerzas Armadas es controlar el tránsito aéreo y, cuando detecta vuelos irregulares, transmitir los datos a las fuerzas de seguridad, que son Gendarmería y Prefectura". Estos datos son, según explicó el funcionario, "la matrícula de la aeronave, hacia dónde va, el procedimiento de aterrizaje, y el tipo de aeronave". Puricelli señaló que la legislación argentina no permite actuar con las Fuerzas Armadas para represión del narcotráfico, y recordó que esta norma es igual a la de Estados Unidos.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner lanzó ayer en Santiago del Estero el programa de radarización "Escudo Norte", del Ministerio de Seguridad, que se articulará con el Plan Fortín II, del Ministerio de Defensa, para la lucha y prevención contra el narcotráfico.
El programa "Escudo Norte" está articulado por el Ministerio de Seguridad, y el Ministerio de Defensa aporta, con su plan Fortín II, los siguientes elementos: un radar primario de alcance medio (RAME 3 D) para vigilancia y control, 20 radares Rasit (de corto alcance) y una sección de dos aeronaves Pucará con rol interceptor. También 4 helicópteros, una aeronave de transporte F-27, un helicóptero C-182 para tareas de búsqueda y salvamento, una aeronave de reconocimiento aéreo y 270 efectivos (90 de la Fuerza Aérea y 180 del Ejército Argentino).

Los radares fueron construidos por la empresa estatal Invap, dedicada al diseño y construcción de sistemas tecnológicos complejos, con una trayectoria de más de treinta años en el mercado nacional y de más de veinte en la escena