Al cierre de junio, y con vistas al comienzo del segundo semestre, los representantes del Foro Argentino de Consultores y Empresas de Viajes (Facve) se reunieron para analizar la actualidad del sector y proyectar los desafíos y oportunidades para la segunda etapa del año. 

En este marco, los presentes coincidieron en que el sector turístico en Argentina enfrenta una serie de desafíos. En particular, al día de hoy persisten distorsiones que afectan tanto a consumidores como a las empresas del rubro. 

Aspectos claves para el desarrollo de la actividad, tales como la imposibilidad de procesar transacciones en dólares, la alta carga impositiva, y las restricciones para ofrecer financiamiento en cuotas para viajes internacionales, siguen afectando y entorpeciendo la actividad. 

En este sentido, desde Facve puntualizaron que en conjunto con otras instituciones del sector, siguen trabajando activamente para abordar estas problemáticas y proponer soluciones concretas a las autoridades correspondientes. "Esperamos que podamos resolver estas cuestiones y lograr un trabajo mancomunado con sector público para por fin dar respuesta a estos puntos clave que condicionan el desarrollo de la actividad”, expresó Carlos Núñez, director ejecutivo del organismo. 

Otra de las principales dificultades a las cuales las empresas de viajes se siguen enfrentando es el Impuesto sobre los Débitos y Créditos (IDC). “Es una carga adicional que afecta significativamente a las agencias de viajes y aerolíneas”, señalaron. A su vez, comentaron que este impuesto se aplica sobre un dinero que no es propio de las agencias, lo que genera una distorsión impositiva que impacta negativamente en la rentabilidad y operatividad del sector. 

En esta línea, Nuñez resaltó: “Estamos impulsando la revisión de esta normativa para que se elimine o, al menos, se reduzca significativamente su carga”.

Sumado a ello, también señaló que el Impuesto PAÍS agrava las compras en moneda extranjera, ya que añade una carga impositiva del 30 % sobre las transacciones internacionales. “Esto no solo encarece los viajes al exterior para los consumidores, sino que también reduce la competitividad de las agencias de viajes nacionales. Este impuesto se superpone con otras cargas impositivas, creando una imposición sobre la imposición, que agrava aún más la situación financiera del sector”, agregó. 

Otra de las solicitudes más urgentes comunicadas oportunamente al Banco Central de Argentina explicó que es la autorización para procesar transacciones con tarjetas de crédito y débito en dólares y acreditar los pagos en la misma moneda. 

Esta medida, -indicó-, no solo facilitaría las transacciones para los consumidores, sino que también aliviaría la demanda de divisas, ayudando a preservar las reservas del país. Esta iniciativa es esencial para ofrecer un servicio más flexible y adaptado a las necesidades del mercado actual, donde la demanda por pagar en moneda extranjera ha crecido significativamente.

“La posibilidad de ofrecer financiamiento en cuotas es una herramienta estratégica que actualmente solo está disponible para el turismo nacional. En tales circunstancias, desde el Foro Argentino de Consultores y Empresas de Viajes, estamos proponiendo que esta facilidad se extienda también a los viajes internacionales”, detalló. 

En este sentido, remarcó que la disposición del Banco Central, que impide la compra de pasajes y servicios turísticos en el exterior en cuotas con tarjetas de crédito, vigente desde 2021, debe ser revisada para brindar a los consumidores mayores opciones de pago y fomentar el crecimiento del turismo internacional.

“Nuestro objetivo principal es crear un entorno más favorable para el sector viajes, reducir las cargas impositivas y regulatorias, y permitir una mayor flexibilidad en las transacciones financieras. Este trabajo conjunto es fundamental para alcanzar soluciones que beneficien a todos los actores del sector y promuevan un crecimiento sostenible”, afirmaron desde Facve.

Por tanto, los desafíos que enfrenta el sector turístico en Argentina son numerosos y complejos, pero con un trabajo coordinado y propuestas claras, a su vez, afirman que están convencidos de que es posible avanzar hacia un entorno más favorable y competitivo. 

Los representantes de Facve continúan comprometidos en su labor de representar los intereses de sus miembros y trabajar por un futuro más próspero para la industria de viajes y turismo en el país.