La semana comenzó de una manera distinta esta vez. A las 02:35 de la madrugada (hora de Roma), el Papa Francisco falleció en su residencia de Santa Marta producto de un derrame cerebral irreversible. La figura más importante de la iglesia católica, marcó un antes y después con su figura disruptiva dentro de una institución que, tradicionalmente, se mantenía al margen de las cuestiones nacionales. 

Esta triste noticia para toda la comunidad católica, atraviesa uno de los segmentos destacados de la estructura turística. En Argentina se estima que este producto mueve de un 7 % a 10 % de pasajeros, mientras que a nivel mundial los viajes con esta índole es del 20 %. 

Desde la asunción de Francisco como sumo pontífice ya pasaron 12 años. Desde 2012 hasta 2019, el crecimiento de los viajeros argentinos hacia Italia aumento un 240 %, según los datos brindados por el ENIT Argentina, lo que representa 704.000 pasajeros. El crecimiento fue sostenido y regular hasta la pandemia, sin embargo, luego de la misma se recuperó y los viajeros locales aumentaron en un 1340 % entre 2021 y 2024. Finalmente, el año pasado la cifra alcanzó los 432.000 visitantes.

En cuanto al número de pasajeros que viajaron a Italia por motivos religiosos desde la asunción del Papa Francisco, el incremento fue del 300 % entre 2012 y 2013. A lo largo de los años el crecimiento fue sostenido, registrando entre 2018 y 2019 un aumento del 467 %. Luego de la pandemia, se registró otro pico de viajeros hacia Italia por turismo religioso desde 2022 a 2024 en un 300 %.

El Papa Francisco y su impacto en los viajes al Vaticano

Con tantos argentinos visitando el país del Vaticano, Mensajero habló con Uri Rajsfus, responsable de Departamento Turismo Religioso de Vietur, quien aseguró que Roma sigue siendo el punto de partida indiscutido para quienes viajan a Italia motivados por la fe, pero en los últimos años se ha ampliado el abanico de lugares con interés espiritual y cultural.

“El número uno ahora es Roma, no tengo duda”, afirmó Rajsfus, aunque también destacó el crecimiento de regiones como la costa amalfitana, Nápoles, Sorrento, Capri, la Puglia y la ciudad de Matera. A esto se suman santuarios tradicionales como San Giovanni Rotondo y Loreto, que forman parte de los circuitos que cada vez más agencias ofrecen. “Italia tiene interés para todo”, resumió, dejando en claro que el turismo religioso hoy trasciende la figura del Papa y se diversifica en múltiples recorridos que combinan lo espiritual con lo cultural.

Con la muerte de Francisco, se abre un nuevo capítulo en la historia de la Iglesia, y eso inevitablemente genera expectativas en torno a quién será su sucesor. El perfil del próximo Papa podría influir en la manera en que se vive y se percibe el turismo religioso, tanto en Roma como en otros puntos de Italia. 

El responsable del Departamento de Turismo Religioso de Vietur, explicó: “La expectativa de quién será el nuevo Papa también va a ser un gancho para el visitante”, y agregó que la figura de Francisco, incluso tras su fallecimiento, seguirá siendo un gran motivo de visita. “Estoy casi seguro que la gente va a querer ir a hacer un agradecimiento, un respeto hacia él”, afirmó. En ese sentido, la posibilidad de visitar su tumba y rendir homenaje al primer Papa argentino podría convertirse en un nuevo impulso para el turismo hacia el Vaticano en los próximos meses.

El Papa Francisco y su impacto en los viajes al Vaticano

A pesar del contexto sensible que representa su muerte, desde el sector turístico ven una oportunidad de crecimiento sostenido para los viajes religiosos hacia Italia. Según Rajsfus, “el gancho principal ahora es el jubileo, que está dictaminado por la Iglesia, no por el Papa”, y remarcó que este evento genera un calendario intenso de actividades que mantiene el interés durante todo el año.

En combinación con un contexto económico que, al menos por ahora, favorece los viajes al exterior, y una oferta aérea que ha crecido, el escenario parece propicio para un aumento del flujo turístico hacia Roma y otras regiones italianas. “Es un combo que quizás, a partir de ahora, con esta coyuntura, pueda hacer que incluso más argentinos decidan viajar a Italia”, señaló.