Booking, acosada por las autoridades francesas, acaba de decidir echar de su lista de alojamientos en oferta a quienes no cumplan con la ley, o sea, a quienes no estén legalmente registrados en el ayuntamiento de París o superen los límites de comercialización.

Pese a todas las órdenes, muchos propietarios seguían ofreciendo sus productos en portales como Booking. Pero, finalmente la empresa americana con base en Ámsterdam ha tomado medidas. “hemos retirado de nuestra oferta en París un 20 por ciento de lo que teníamos”, dice la directora general de Francia, España y Portugal, Vanessa Heydorff, en referencia a los anuncios de París.

Según Booking, el portal ha pasado de tener 5.000 a 4.000 ofertas de alojamiento. Booking compite duramente en este mercado con Airbnb, Abritel, Windu, Paris Attitude y Sejourning. El municipio parisino ha reiterado sus amenazas de sanción contra las últimas empresas, por su reiterado incumplimiento de la exigencia de que toda la oferta que exhiben esté debidamente registrada en las oficinas públicas.

Adicionalmente, la legislación en vigor en la capital francesa exige que quien ofrezca su alojamiento por un periodo de más de 120 días tiene que ser bloqueado porque eso no está permitido a los particulares.