Concursos de disfraces, festivales de historieta, singulares ciclos de lectura a cargo de intérpretes tan disímiles como la escritora Liliana Bodoc, la animadora Flavia Palmiero o la actriz Iliana Calabró son algunas de las propuestas que hasta el 30 de julio se sucederán en el predio de Figueroa Alcorta y Pueyredón.
"Lo importante es no perder de vista que la feria está acá para que los chicos se acerquen a los libros", dice a Télam Gabriela Adamo, directora de la FLIJ, al término del breve acto inaugural que encabezaron ayer por la mañana el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, y el ministro de Cultura, Hernán Lombardi.
¿El objetivo? "Que los chicos vengan, escuchen a los narradores, jueguen en los talleres poesía o vean las representaciones de obras literarias", grafica mientras un grupo de niños se amontona frente a un cuarteto que con charango y violín incluido interpreta "El adivinador", la primera de las presentaciones programadas en honor la escritora y cantautora María Elena Walsh.
"Es decir: que miren, toquen, revuelvan todo lo que les parezca interesante en los stands y se lleven algún libro bajo el brazo para seguir leyendo después", sintetiza Adamo.
A un costado, media docena de niños saltan y se chocan entre sí tratando de atrapar los globos lilas y rosados que un grupo de mujeres deja caer desde el primer piso, como parte de la celebración inaugural.
Con entrada libre y gratuita para menores de 18 años la feria se suma así al ecléctico abanico de actividades culturales que estas vacaciones de invierno propone la ciudad.
"Aires de buenos libros" es el lema que este año acompaña a la feria, en el marco de la declaración de Buenos Aires capital mundial del libro por parte de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
Antes de despedirse y dar un último repaso a los `fixtures` del encuentro de profesionales del libro y las jornadas para docentes y mediadores de lectura, Adamo se refiere a la nueva disposición de los stands en la feria.
"Este año la diagramación y disposición de los locales es mucho más amigable que en ocasiones anteriores -destaca-, con espacios transitables mucho más amplios como se puede ver en la entrada, los pasillos y las salas; y con una calefacción mucho mejor resuelta."
Colihue y De la Flor -presentes desde la primera edición de la FLIJ- son algunas de las editoriales que podrán encontrarse en el lugar, que en el stand de la Cámara del Libro presenta material de numerosas editoriales pequeñas y alternativas que de otra manera no podrían haber participado de la feria.
Este año, la entrega de los Premios Pregonero, en reconocimiento a los difusores de la literatura infantil y juvenil en el país, se realizará el 28 de julio, a las 18, en la sala María Elena Walsh, y tendrá como destinatarios, entre otros, a la revista mendocina Abracadabra y a la biblioteca bonaerense del Dragón.
Por otra parte, el sábado 23 de julio a las 15.30 se lanzará el "Cosplay", el concurso de disfraces que promete interesantes órdenes de compra para quienes consigan el premio a la mejor caracterización de su personaje favorito.
Mientras que el esperado Festival de la Historieta Superheroico promete sumergir a los fanáticos del manga y el comic en la dinámica de ese arte los dos últimos días de feria, el 29 y 30 de julio próximos.
A los destacados autores argentinos -Chanti, Fernando Calvi, Max Aguirre, Darío Brizuela, Jorge Lucas y Ariel Olivetti, entre otros- que darán charlas, talleres y muestras, se suma esta vez el guionista estadounidense Marv Wolfman, quien compartirá su experiencia en historieta, animación y videojuegos.
Todas las actividades de la Feria del Libro Infantil y Juvenil -como visitas escolares guiadas, obras de títeres y talleres de comic y guión- pueden consultarse en el sitio de Internet www.el-libro.org.ar/infantil.