Hace meses que se disputa la tenencia en el estado de los complejos de turismo social en Chapadmalal y Embalse. Luego de que el secretario de Turismo, Ambiente y Deportes de la Nación, Daniel Scioli, declarara que ambas unidades eran innecesarias y debían ser traspasadas para su venta, las alarmas se encendieron en cámara de senadores y diputados. Desde la oposición se considera que estas estructuras son facilitadoras de un derecho, mientras que el oficialismo las ve como una perdida de espacio y dinero. 

Como reacción a este escenario y en un acto que apuntaba a resaltar la defensa del patrimonio histórico y social, los senadores Fernando Rejal, Guillermo Andrada, Carolina Moisés y Fernando Salino, pertenecientes al bloque Convicción Federal, presentaron un proyecto de ley. Este tenía el objetivo de proteger y poner en valor los Complejos Turísticos Chapadmalal y Unidad Turística Embalse Río Tercero, declarándolos como Monumentos Históricos Nacionales. 

Sin embargo, el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sutrzenegger, celebró y anunció recientemente en su cuenta de X que se transferirán ambas propiedades a la Agencia de Administración de Bienes de Estado y profundizó: “El Estado no debe proveer servicio de hotelería. Sí, puede, si lo decide, ofrecer servicios de subsidios al turismo social o educativo, pero no tiene ningún sentido que gestione una actividad compleja para la que no tiene ninguna ventaja competitiva y que no conoce”. 

Fede Sturzenegger on Twitter / X

A su vez, festejó la “transferencia a un operador experto en el tema” para potenciar el valor turístico de ambas locaciones y finalizó agradeciéndole al funcionario encargado de la cartera turística nacional por la “firmeza para tomas la decisión”.

 Turismo social en números

La Unidad Turística de Embalse es un predio de 300 hectáreas, aproximadamente, que alberga siete hoteles y 36 bungalós emplazados en un pintoresco paisaje del valle de Calamuchita, próximo a esa ciudad. Por su parte, Chapadmalal cuenta con nueve hoteles ubicados a los pies del mar y de las mejores playas. Ambos albergan una casa de té, un polideportivo y servicio médico.

De estas unidades dependían 140 empleados que trabajan en las 2000 plazas que había entre Embalse y Chapadmalal.