La organización, junto con la UNESCO, se unieron para preparar directrices destinadas a la reactivación responsable del segmento.

La Organización Mundial del Turismo invitó a la UNESCO a formar parte de la elaboración de  la Guía de la OMT para la recuperación inclusiva. Número 2: Turismo cultural, el segundo conjunto de directrices relacionadas con el impacto sociocultural de COVID-19. Esta publicación muestra cómo la pérdida de ingresos está afectando a las comunidades, al patrimonio protegido y a los eventos, espacios e instituciones culturales.

La directrices sobre el turismo cultural hacen hincapié en la necesidad del apoyo de los responsables públicos para que el segmento tenga una presencia relevante en los planes de emergencia y contingencia de los destinos turísticos. Así, la OMT solicitó a la industria cultural a "crear estructuras participativas de gobernanza, que reúnan a artistas, creadores, profesionales del turismo y la cultura, el sector privado y las comunidades locales para mantener un diálogo abierto e intercambiar datos y soluciones en tiempo real".

Según indicaron desde la organización, el 90% de los países optó por cerrar total o parcialmente sus sitios del Patrimonio Mundial. Incluso, en muchos casos, determinados lugares de gran importancia para la humanidad cesaron sus actividades por primera vez en décadas. "La caída repentina de las llegadas de turistas se ha dejado sentir en todo el globo, mientras millones de personas han buscado en las experiencias culturales virtuales consuelo e inspiración", explicaron desde la OMT.

Cabe mencionar que la publicación de las directrices llega en el contexto del Año Internacional de la Economía Creativa para el Desarrollo Sostenible 2021, una iniciativa de las Naciones Unidas que tiene como finalidad reconocer que diferentes manifestaciones de la cultura pueden contribuir a impulsar los Objetivos de Desarrollo Sostenible del Turismo (ODS).