A través de un comunicado, la low-cost indicó que irse del Aeropuerto de El Palomar "no es una opción comercial".

La semana pasada, el Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (ORSNA) le había expresado a la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) que, en el AMBA, sólo el aeropuerto de Ezeiza permanecerá abierto para vuelos regulares, debido a que "es el único que ha adaptado medidas y procesos con el fin de atender la mentada demanda en condiciones de seguridad".

Por ese motivo, las alarmas en El Palomar comenzaron a sonar, y desde la low cost amarilla informaron que no tienen intenciones de mudar sus operaciones al Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini: "Flybondi expresa su más absoluto rechazo a esta decisión, cuyos argumentos son íntegramente impugnables y maliciosos; pero lo que es más grave aún, es que deja al descubierto el desmanejo regulatorio y la ausencia total de planificación y coordinación, generando dos claros damnificados: los pasajeros y los trabajadores".

Además, la aerolínea aprovechó para recordar que el 14 de octubre, Mario Meoni, ministro de Transporte de la Nación, en compañía de Matías Lammens, titular de la cartera de Turismo y Deportes, y Paola Tamburelli, administradora nacional de ANAC, había confirmado en una conferencia de prensa y porteriormente en diversas entrevistas, que el Aeropuerto El Palomar continuaría funcionando.

Esteben Tossutti, presidente de la compañía, declaró:"Volar desde Ezeiza no es una opción comercial para Flybondi ni tampoco para nuestros pasajeros, y las autoridades de gobierno y de los organismos reguladores conocen esta realidad. Su decisión demuestra el poco respeto hacia los pasajeros que adquirieron tickets para volar desde El Palomar y que hasta último momento no saben desde donde saldrá su vuelo, sumado a los miles de pasajeros que sólo pueden viajar en avión si lo hacen desde un aeropuerto al que pueden llegar en transporte público. También nos llama mucho la atención que en este contexto de complejidad económica y profunda crisis de la industria, se pongan en riesgo miles de puestos de trabajo".

"Vamos a solicitarle a las autoridades la revisión de esta medida y realmente esperamos que puedan tomar decisiones idóneas, que pongan en el centro a los pasajeros, a los empleados y al trabajo genuino. Además, en el caso en que sea un aspecto valorado por quienes definieron esto, sería importante que sus decisiones no busquen afectar la continuidad de un modelo de negocio que en poco más de dos años ha logrado democratizar el avión como medio de transporte y transformarlo en una opción accesible para todas las personas de este país", agregó el ejecutivo.