Con tal de resguardar la salud de sus huéspedes y su tripulación, la naviera seguirá sin retomar su actividad hasta el 30 de noviembre.

Al igual que muchas empresas del sector, Royal Caribbean se ve afectada en lo que refiere a sus tareas habituales debido a la pandemia de coronavirus y a raíz de este tema confirmó que sus operaciones seguirán suspendidas en principio hasta el 30 de noviembre.

A excepción de las salidas ya pautadas desde Hong Kong, el resto de los viajes en cruceros seguirán sin poder realizarse, en lo que significa una nueva traba más en relación a las industrias turísticas que no pueden trabajar con normalidad.

La naviera implementó esta medida de acuerdo a los protocolos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, cuyo propósito es establecer un entorno seguro para sus huéspedes, su tripulación y también para las comunidades donde desembarcan los barcos.

El grupo agregó que su marca Celebrity Cruises también suspenderá su programa de invierno completo 2020/21 en Australia y Asia, mientras que la marca Azamara dejará sin efecto sus viajes de invierno 2020/21 en Australia, Nueva Zelanda, Sudáfrica y América del Sur.