Aun con una caída interanual de 82,7%, fue el mes del año con mayor movimiento de pasajeros en América Latina desde la irrupción de la pandemia. 

A paso muy lento, pero sostenido, la industria aérea regional empieza a dar algunos signos vitales. Según el reporte mensual que publica la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA), agosto fue el mes del año con mayor tráfico desde la irrupción de la pandemia. En concreto, la cantidad de pasajeros transportados cayó 82,7% en comparación con el mismo período de 2019, lo cual se traduce en un total de 30.452.887 personas menos.

La cantidad de viajeros que volaron en alguna de las aerolíneas que operan en América Latina durante agosto fue de aproximadamente 6.350.000, lo cual puede sonar positivo si se tiene en cuenta que en abril ese número fue de apenas 1.100.000. En julio, de hecho, la caída había sido de 87,6%.

Según sostuvo José Ricardo Botelho, CEO y director ejecutivo de ALTA, esta leve recuperación se explica por la tímida reapertura de algunos mercados del continente. Dentro de la cifra global de agosto, el 83% corresponde al tráfico doméstico, con los dos mercados internos más importantes de la región, como Brasil y México, decreciendo en menor proporción que en meses anteriores.

Sin embargo, en el plano internacional aún continúan los problemas, ya que la retracción fue de 90,8%. No obstante, se espera que las estadísticas de septiembre muestren alguna mejoría en este aspecto por el levantamiento de las restricciones en países como Colombia, Costa Rica y El Salvador.