El sector privado de ese país cree que su buen manejo de la pandemia será un atractivo fundamental para competir con destinos como Brasil, Chile y Estados Unidos. 

Si bien esta semana el presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou, dijo que la apertura de fronteras con Argentina y Brasil implicaría aumentar las posibilidades de tener más contagios y de volver hacia atrás, los empresarios se ilusionan con recibir un flujo considerable de pasajeros argentinos durante el verano.

Con una muy baja tasa de positividad y apenas 35 muertos por COVID-19, Uruguay es uno de los países sudamericanos que mejor gestionó la pandemia. Más allá de que aún falta mucho para la temporada alta y de que todo quedará sujeto a las condiciones sanitarias en Argentina, estas reducidas cifras podrían ser un aliciente para que los turistas nacionales elijan cruzar el Río de la Plata en lugar de pasar sus vacaciones en destinos muy golpeados por la crisis mundial, como Brasil, Estados Unidos y Chile.

Por lo menos así lo analizó Javier Sena, presidente de la Cámara Inmobiliaria Punta del Este-Maldonado, en diálogo con Ámbito Financiero. "Estamos muy bien. Abrimos casi todo, incluidos comercios y shoppings. Uruguay es una opción segura y esperamos buena demanda. Especialmente, porque se puede llegar de forma terrestre", agregó.

En tanto, Juan Martínez, titular de la Cámara Uruguaya de Turismo, decidió ser más cauto, aunque también se mostró esperanzado: "Ya se abrió el turismo interno en todo el país con fuertes promociones, lo cual es una buena señal. Ahora está en funcionamiento el 35% de toda la oferta, ya que se habilita por cupos. Se distribuyeron los protocolos para la actividad y seguimos trabajando en nuevas medidas. Somos muy optimistas con el verano. De a poco todo se va acomodando, pero más allá de que acá haya poquísimos casos hay que ver cómo evolucionan los contagios en Argentina para poder pensar mejor en los próximos meses".

A su vez, como siempre ocurre en los meses previos a la temporada, desde el Ministerio de Turismo que conduce Germán Cardoso aseveraron que pensarán en diversos incentivos fiscales y promociones para atraer a argentinos. El optimismo y la esperanza que reinan en el país vecino se entienden a partir de los números, ya que Argentina representa el 56% del total de ingresos anuales del turismo extranjero en Uruguay y el 70% en los meses de verano.

En la actualidad, los visitantes deben contar con un hisopado negativo para ingresar, aunque todavía no está claro si esa medida persistirá una vez que se abran las fronteras.