El Gobierno firmó un DNU para impedir el corte de los servicios públicos a las Pymes, y otro para suspender multas y cierres de cuentas por cheques sin fondos.

A través de dos decretos presidenciales comunicados ayer en el Boletín Oficial, el Gobierno nacional estableció dos medidas para aliviar en el corto plazo la delicada situación que atraviesan las empresas de todo el país, incluidas las de turismo. El primer DNU les prohíbe la suspensión de sus servicios por falta de pago a las empresas de energía eléctrica, gas por redes y agua corriente, telefonía fija o móvil, internet y televisión por cable. La medida aplica para usuarios con mora o falta de pago de hasta tres facturas consecutivas o alternas, con vencimientos desde el 1° de marzo.

Entre los sectores beneficiados con este decreto se encuentran las micro, pequeñas y medianas empresas que cuenten con certificado MiPyme, además de los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo, de la Asignación por Embarazo y jubilados, entre muchos otros. De esta manera, muchas compañías del sector podrían prorrogar los pagos de los servicios por tres meses y desahogar un poco sus finanzas.

Sin embargo, el más importante de los anuncios fue la prohibición de establecer multas o de inhabilitar cuentas bancarias por cheques sin fondos hasta el 30 de abril. A su vez, en el texto firmado por Alberto Fernández y todos los integrantes de su gabinete, se postergó hasta la misma fecha la obligación de presentar un libre deuda con entidades como ANSES o AFIP como requisito para el otorgamiento de créditos.

Con esta disposición, el Gobierno busca que haya efectivo en las empresas para el pago de salarios de marzo y abril. El DNU salió justo un día antes de que el Banco Central anunciara la habilitación del clearing bancario (entra en vigencia hoy), proceso mediante el cual se validan y cobran los cheques.

"El clearing permite compensar los cheques que estaban pendientes, pero con esto aquellas empresas que no tengan fondos no serán penalizadas y no se les cerrarán las cuentas", explicó ante Mensajero el economista Joaquín Escardó, quien insistió en que la intención es que todo el efectivo disponible se destine al pago de sueldos.

Algunos referentes de la actividad consultados por este medio dijeron que este tipo de medidas son insuficientes. "Nuestro mayor problema es que la actividad no sólo está parada porque no se comercializan servicios, sino también por la devolución de pasajes y paquetes una vez que todo vuelva a la normalidad. Si no tenemos un paraguas será difícil", dijo una fuente de FAEVYT.

Si bien a muchas empresas les vendrá bien esta decisión para no destinar todos sus fondos al pago de los compromisos pendientes y así poder afrontar los salarios de su plantilla en un mes de abrupta caída de los ingresos, en el sector temen por lo que sucederá a partir de mayo, y más teniendo en cuenta las posibilidades ciertas de que la cuarentena se extienda hasta mediados de abril. "Habrá muchas empresas con facturación cero", advirtieron.

"Esto sirve, pero no alcanza. De igual manera, es muy compleja la situación porque nunca pasó nada igual. Se está parando un país y al mundo durante muchos días. Nadie tiene la receta", dijo Escardó.