Apenas un mes después del terremoto y posterior tsunami que dejaron 1.500 muertos en la ciudad de Palu, en las islas Célebes, Indonesia se enfrenta a una nueva tragedia con el accidente de un avión de Lion Air, la aerolínea low cost más reconocida del país. Lion Air confirmó que el avión realizaba un viaje de una hora y 10 minutos desde Yakarta a Pangkal Pinang, una de las islas frente a Sumatra, con 181 pasajeros, junto con los ocho miembros de la tripulación.

Al parecer, el país no es ajeno a los accidentes aéreos: hasta 2016, todas sus aerolíneas tenían prohibido volar en la Unión Europea por motivos de seguridad, y, desde entonces, solamente unas pocas han obtenido el permiso. Vale aclarar, también, que no es el primer accidente que sufre Lion Air. En 2002, un avión de la compañía se estrelló al poco de despegar, en 2004, otro vuelo sufrió un accidente en Surakarta, con un saldo de 25 muertos, y en 2013, se enfrentó a un accidente después de que una aeronave terminara en el mar luego de un intento de aterrizaje en Bali.

A pesar del historial accidentado, la aerolínea consiguió salir de la lista prohibida de la Unión Europea en 2016, gracias a un ambicioso programa de modernización, que incluyó la compra de una flota de casi 500 aviones, ya que al principio tenían alrededor de 100.

Desafortunadamente, el avión sufrió problemas técnicos durante un vuelo el domingo, aunque fueron resueltos antes de despegar este lunes, según confirmó la aerolínea. “El avión estaba en condiciones de volar. Hubo un reporte de inconvenientes en un trayecto la noche anterior, entre Denpasar y Yakarta. Por suerte, el problema fue resuelto, y obtuvo el certificado de vuelo por un ingeniero”, expresó Edward Sirait, director ejecutivo de Lion Air, en una conferencia prensa.