Por Roberto Palais
Director de Promoción del INPROTUR

Hace un par de semanas nos sorprendimos bastante con algunas de las afirmaciones que ofreció a este medio la Directora de Investigación, Observatorio Turístico y Prensa del Ente Turismo de la Ciudad de Buenos Aires, mostrando algunos datos (inconsistentes) de llegadas de extranjeros a la Argentina, y destacando un rol (inexistente) de este distrito en su tarea  en la promoción turística internacional.
La tarea de promoción turística internacional que realiza el Instituto Nacional de Promoción Turística (INPROTUR) encabezado por el ministro de Turismo, Enrique Meyer, es destacada a nivel mundial. Sin ir más lejos, recientemente, Taleb Rifai, el titular de la Organización Mundial de Turismo (OMT) durante una visita a nuestro país recalcó: “Los logros de Argentina en turismo internacional son producto de las políticas correctas. (…) Argentina es hoy el destino turístico internacional más visitado de Sudamérica, y no es por accidente sino como resultado de las políticas y un liderazgo correcto. La performance turística que han tenido en los últimos cinco o seis años fue fantástica, sin dudas por eso estoy acá”. Realidades.
La Argentina crece. Los extranjeros cada vez la buscan más. De acuerdo a datos que ofrece el conocido motor de búsqueda Google: “Se observa un incremento del 18% en la cantidad de búsquedas asociadas a la Argentina dentro de la categoría Viajes y Turismo desde el resto de los países del mundo”. Y esto no es fruto de casualidades. Sino de causalidades. Más acciones de promoción turística, más profesionalización del sector, más trabajo mancomunado entre el sector público y privado. Gestión.
Analicemos un dato específico que arroja la Encuesta Internacional de Turismo (ETI): El ingreso de turistas extranjeros a la Argentina durante el primer semestre del año igualó el récord del mismo período del año pasado al totalizar 1.332.397 millones de personas que entraron por el Aeropuerto Internacional de Ezeiza y por Aeroparque, lo que nos muestra que a pesar de la coyuntura internacional se mantiene el gran resultado de la gestión en materia de promoción internacional a cargo del Inprotur.-No es cierto que las acciones de promoción turística en el mundo son realizadas por la Ciudad de Buenos Aires, sino que son acciones encabezadas y financiadas por el INPROTUR, con el apoyo logístico de la Cámara Argentina de Turismo y se hacen en forma conjunta con otros destinos y actores privados. Por lo que inmediatamente nos invita a reflexionar si la Ciudad de Buenos Aires tiene una política clara de turismo a nivel nacional e internacional.- ¿Por qué es el único destino que no disfruta las bondades del ordenamiento de feriados, como sí lo hacen el resto de las provincias de nuestro país? ¿Le faltará replantearse algunas cosas antes de comenzar a criticar una gestión que cambió históricamente la forma de hacer turismo en la Argentina? Mea Culpa.
El debate suma. Y en ese sentido, desde el Ministerio de Turismo y el INPROTUR, siempre fuimos organismos transparentes y abiertos al diálogo. En el segmento de Turismo de Reuniones hemos logrado que la Ciudad de Buenos Aires sea el primer destino de Latinoamérica y el cuarto de toda América. Pasamos del puesto 36 en 2007, al 18 en 2011, con un crecimiento superior al 200% en la realización de congresos internacionales en todo el país. Y esto sin duda, es mérito exclusivo del Ministerio de Turismo y del INPROTUR, puesto que la Ciudad de Buenos Aires no invierte en este producto, ni colabora en ninguna de las acciones estratégicas para capturar nuevos eventos. Nos encantaría debatir seriamente las razones que defiende para no tener un centro de convenciones a la altura del destino. Hoy la Ciudad Autónoma de Buenos Aires está perdiendo eventos importantes por la falta de un centro de convenciones apropiado. Quizás las prioridades pasen por otro lado, o ellos no vean la potencialidad que tiene un segmento que, sólo en el 2011, le reportó al país 4.500 millones de pesos.
La Ciudad en materia de turismo es un gigante con pies de barro, lleno de potencialidad pero sin logros serios que lo respalden. Quizás debería comenzar por copiar el modelo que aplicó el Estado Nacional en los últimos nueve años para ver que trabajando en equipo se puede generar mucho más que hablando mucho