Todos los grupos de egresados que ingresan a Bariloche, desde hace años reciben antes de entrar a la ciudad charlas de concientización sobre temas como seguridad y cuidado del medio ambiente, y control de ingreso de pirotecnia y alcohol. Este año se instalará además una cámara termográfica en el puesto de control caminero, según lo dispuesto por el Ministerio de Salud de Río Negro. Como principal medida se instalará en el puesto de la Policía de Tránsito un trailer sanitario del Ministerio con una cámara térmica para detectar altas temperaturas y se anunció la puesta en funcionamiento de una segunda cámara en el aeropuerto internacional de la ciudad.
Los controles serán el complemento para las acciones que ya son habituales en el esquema de funcionamiento de este sector de la industria turística. Todos los estudiantes presentan antes de su viaje una declaración jurada con sus datos de salud, y permisos de sus padres o responsables, además de tener un seguimiento permanente de cada una de las empresas que los transportan.
Todos los establecimientos que trabajan con turismo estudiantil recibirán en los próximos días un protocolo y medidas específicas para adoptar en caso de detectar un pasajero con síntomas. La ciudad recibe anualmente 100.000 egresados, con una temporada que se extiende de junio a enero. Para este año, no se prevé una baja en la cantidad de estudiantes que visiten Bariloche, debido a que los paquetes fueron vendidos el año anterior, con antelación a la crisis financiera y sanitaria.