Santiago de Compostela es un destino de peregrinación desde el año 813 y se prepara para el Año Santo en el 2010, cuando calculan recibirán cerca de 8 millones de visitantes.

La visita del alcalde de Santiago de Compostela, Xosé A. Sánchez Bugallo, y del Consejero de Promoción Económica, Empleo, Comercio y Turismo, Xosé Manuel Iglesias Iglesias, fue la excusa para reunir a operadores de turismo, agentes de viajes y prensa en la sede de la Oficina Española de Turismo el pasado martes.
Según Iglesias Iglesias los principales países emisores de visitantes a la ciudad del norte de España son Francia, Italia, Alemania y el Reino Unido. “Santiago de Compostela es referencia fundamentalmente por el “Camino” (NR: el Camino de Santiago), pero también por la monumentalidad, la tradición cultural y la gente nos visita también por el patrimonio histórico y natural.
Somos una ciudad pequeña, manejable y una de las de mayor espacio verde por persona de toda España, que puede ser disfrutada en todas sus facetas en dos o tres días”.
“Las peregrinaciones hacia Santiago de Compostela están por cumplir sus 1200 años, ya que comenzaron en el año 813 y así se han mantenido por un tiempo” así comenzaba la presentación de su ciudad el Alcalde Xosé Sánchez Bugallo.
“Cuando Santiago se construye gran parte de España estaba bajo dominio árabe-musulmán y la capital de Galicia, que era Braga, estaba 100 kilómetros al sur y eramos el norte del territorio ocupado, y se produce un fenómeno maravilloso que fue que de toda Europa empiezan a peregrinar a nuestra ciudad. Tan es así que  hace 10 años nosotros festejamos el milenio de la conversión del rey de Noruega, que fue luego San Olaf, que tuvo lugar durante los siete años que estuvo prisionero en Santiago.
Es una ciudad con 2600 edificios catalogados que se han preservado y rehabilitado lo que la convierte en un sitio muy singular con un casco histórico bastante importante.
En los tiempos actuales las peregrinaciones no están circunscriptas a los católicos y llegan grupos de países evangélicos como Finlandia, Suecia o por ejemplo de Japón; y de América siempre hemos tenido mucha presencia y llegan muchos desde Brasil, -una incorporación reciente pero muy potente-, de Estados Unidos y México.
El año que viene es Año Santo y el siguiente será en 2021, y si bien no sabemos cuántos visitantes llegarán les calculamos entre seis a 8 millones de personas, pero lo importante no es la cantidad sino que quienes lleguen se vayan contentos, y nuestras encuestas señalan un 92% de intención de volver.
Hemos preparado la ciudad bastante bien ya que con apenas 100 mil habitantes, tenemos 74 hoteles, varios de 5 estrellas y una red de albergues administrados por la Iglesia ya que en los picos de ocupación (julio) hay días que nos encontramos con 150 mil visitantes. Nosotros recomendamos más de ir en otros meses, pero en cuestiones de Fe no hay recomendación que sirva.
Sabemos que quienes vienen a hacer el Camino de Santiago vienen más en busca de sí mismos que de un perdón de sus pecados. Es un tiempo para reflexionar, para romper con su vida habitual, para pensar en otras cosas.
Nadie que viene a nuestra ciudad queda decepcionado.”

Un caso de estudio
“La ciudad tiene un nivel de seguridad extraordinario. Cada 4 o 5 años hay un homicidio y seguramente sea un caso pasional. No tenemos atracos a bancos y mantiene estándares de calidad extraordinarios. Y en Años Santos aunque recibimos siete u ocho millones de visitantes nunca hubo un homicidio.
En el Código penal de Bélgica hacer «el Camino» es una sustitución de pena. Si se tiene una condena pequeña o se está en la última etapa se pueden encarar los 800 kilómetros del Camino, que toma unos 37 días andando desde Bruselas, y automáticamente la pena se da por cumplida. Es notable que el caso de reincidencias es mínimo