El ciclo ‘Música Clásica por los Caminos del Vino’ cumple nueve años y lo festeja con nueve jornadas de melodías y brindis. La programación, que hasta el momento se ajustaba al feriado de la Semana Santa, se extenderá de siete a nueve días para que los locales y visitantes tengan su chance de escuchar buena músicas en sitios de pura cepa.
Del sábado 4 de abril hasta el domingo 12, la provincia se poblará de conciertos. “Nada es al azar, las propuestas musicales se deciden en función del escenario. Por ejemplo, ciertos instrumentos son más propicios si la cava de una bodega tiene mucha madera de barricas o más metal. No suena igual un espectáculo en el Polimeni, de Las Heras, que en la intimidad de una pequeña capilla”, se entusiasma el director artístico, Alejandro Sánchez Cadelago.
Ayer, el Gobierno realizó la presentación del ciclo, que -destacaron los funcionarios- ya despierta el mismo interés que la Vendimia en los sponsors. Con el ‘Cuarteto Póstumo de Franz Schubert’, el grupo de cuerdas Aleph mostró en un salón del hotel Sheraton sólo una pizca de lo que turistas y mendocinos podrán disfrutar en Semana Santa.
Bajo el lema ‘Nueve años, nueve días’, la edición 2009 arrancará el 4 de abril en escenarios ubicados en los cuatro extremos geográficos de Mendoza. El espectáculo de apertura será protagonizado por la Orquesta Filarmónica de Mendoza en el estadio Polimeni de Las Heras.
También se escucharán conciertos ese día en el Gran Hotel de Uspallata (Dúo Allegretto), en la Capilla del Arco Desaguadero (Conjunto de Campanas de Bronce) y en el Centro de Congresos y Exposiciones de Malargüe (Golpeando el Aconcagua) Sánchez Cadelago informó que la programación cuenta con diez shows de artistas nacionales e internacionales.
Pero el plato fuerte serán las 50 propuestas locales, que han sido seleccionadas de entre 80 por un exigente jurado.
En cuanto a los escenarios, el director señaló que se ha crecido en variedad, sumando algunos sitios vistosos -como las casonas de bodegas o ciertas reservas naturales- a los ya habituales viñedos, cavas, sitios históricos, plazas, museos y espacios al aire libre. “Hay lugares para todos los públicos.
Por ejemplo, la capilla del ex hospital Emilio Civit crea un ambiente exquisito e íntimo. Las terrazas del hotel de Villavicencio, donde actuarán Los Niños Cantores de Mendoza, han sido pensadas para recibir a toda la familia”, destacó.
El Independencia se vestirá de gala para la ocasión. Es que protagonizará una apretada agenda en esta edición, con conciertos diarios en horarios de tarde y las tradicionales galas nocturnas.
En casi todas las jornadas del festival, el teatro mayor de los mendocinos abrirá sus puertas a las seis de la tarde para homenajear a los maestros que han desarrollado la cultura pianística de Mendoza. El Stenway&Song de gran cola -recientemente adquirido por la Provincia- sonará en las manos de grandes intérpretes, como Dora de Marinis o Roberto Urbay.
El cierre de lujo será también en el Independencia. Allí se presentará el conjunto de cámara barroco ‘La Cetra, quienes pondrán en escena -con una cuidada escenografía y vestuario- la ópera “Serva padrona” de Pergolesee.

Entrada solidaria
Para asistir a los distintos conciertos, mendocinos y turistas podrán conseguir su entrada canjeándola por una caja de leche que se repartirá en zonas carenciadas de la provincia. El Rotary Club será el encargado de la distribución y de asegurar su llegada a todos los departamentos. Se darán dos entradas a cambio de una caja de 800 gramos. En caso de jubilados y estudiantes, el canje será por tres entradas.
Los jóvenes tendrán su espacio propio en el festival. Estudiantes de distintos puntos del país participarán en clínicas de instrumentos con un staff de 18 profesores que provienen de distintos países, como Brasil, Chile, Alemania, Argentina, etc. Luego de la etapa de formación, estos alumnos actuarán en el festival junto a sus maestros. Los organizadores comentaron que ya hay más de un centenar de inscriptos.