Los empleados de la compañía alemana iniciaron un paro tras las fallidas negociaciones salariales que el sindicato del sector servicios llevara a cabo con el directorio de la aerolínea. Los aeropuertos afectados por el paro son principalmente Fráncfort y Hamburgo, aunque Múnich, Dusseldorf y Clonia-Bonn también sufrirían inconvenientes, según informó la organización sindical Ver.di. El cese de actividades abarca a los empleados de tierra y cabina, así como también a los encargados de mantenimiento y catering de las terminales aéreas, lo que impidió el mantenimiento y eldespegue.
Los reclamos efectuados por 4 mil empleados de Lufthansa incluyeron un aumento del 9,8 por ciento y un convenio por un año, mientras que la compañía había ofrecido un aumento salarial del 6,7 por ciento además de una paga extraordinaria, que se traduciría en un incremento anual del 3,35 por ciento.
En cuanto a las rutas internacionales, al cierre de esta edición la compañía ha suspendido seis de largo alcance: a Nueva York, Calgary, Chicago, Dallas, Dubai y Calcuta. Las demoras ocasionadas por el conflicto ya afectan a 30 mil pasajeros que transitan por los destinos de cabotaje de la compañía. Para paliar esta situación, Lufthansa puso en funcionamiento un plan de emergencia, contratando servicios externos, tanto para el mantenimiento como para el catering de los aviones.
Esta huelga no hace más que agravar la situación de la compañía, que ya había transitado por una situación similar con una medida de fuerza llevada a cabo por los pilotos de sus filiales Cityline y Eurowings. Según lo informado a medios internacionales por el portavoz del sindicato, Harald Reutter, las protestas se extenderán a los aeropuertos berlineses de Tegel y Schönefeld, y a los de St