La polémica low cost “prohibirá” facturar equipaje en aquellas rutas en las que vuela un elevado número de pasajeros Business, en un intento por reducir sus costos de asistencia en tierra (handling). El director general adjunto, Howard Millar, dijo que la prueba se realizará sólo en algunas franjas horarias clave en las rutas populares entre este tipo de viajero.
Ryanair ha afirmado que con esta estrategia podría hacer que los pasajeros business paguen una tarifa mayor en esos vuelos “cero equipaje”. Por otra parte, este recargo estará justificado debido a que aumentarán el número de frecuencias permitiendo un retorno mucho más rápido y menor congestión”.
Asimismo, dentro de las estrategias para recortar costos, la compañía reducirá personal al instalar quioscos de auto facturación en los aeropuertos de Stansted y Dublín.
A partir de octubre, permitirá el uso del móvil durante el vuelo, en una primera fase, en los 10 primeros aviones de su base de Dublín en los que ha sido implantada la tecnología. Luego se elevará a 40 aparatos para la época de Navidad. Mediante pago extra de roaming, en principio, permitirá a un máximo de 10 pasajeros realizar llamadas a la vez, dentro de los 10 minutos después del despegue y el aterrizaje. La aerolínea espera, no obstante, tener una mayor demanda de envío de mensajes de texto. <br