“En los centros invernales no hay nieve suficiente para poder esquiar, así que los turistas se quedan tres días y se van porque no tienen mucho para hacer: una vez que conocen la ciudad se vuelven a su casa”. Hugo Mainoni de Dominor expone de esta manera una situación que se viene repitiendo en Bariloche, si bien la llegada de los vuelos alivia la situación del turismo, los prestadores del sector prenden velas para que las nevadas sean más abundantes ya que, con la cantidad insuficiente que se presenta hasta el momento, sólo es posible la práctica de principiantes y en sectores muy limitados de la montaña.
“Generalmente los que se sienten un poco defraudados son esos esquiadores que necesitan una cantidad de nieve sumamente importante que aun no ha llegado, de los 1.800 pasajeros que recibimos por semana el número de los que se vuelven es mínimo, pero es un dato de la realidad” confirma Jorge Batica, director general de turismo receptivo de ‘CVC Latinoamérica’
Por último, Batica completó: “El tema vinculado con las cenizas y las cuestiones que tienen que ver con la dificultad del aeropuerto han hecho que las reservas de este año vengan en un porcentaje que no creo que sea muy grande y la falta de nieve no está ayudando mucho pero nosotros pensamos es muy probable que una nevada rápida haga qu