Los visitantes que lleguen a Cuba para Fin de Año tienen una modalidad diferente de festejar el inicio del nuevo año disfrutando  del maravilloso entorno de las remodeladas plazas de la ciudad vieja de La Habana.
La compañía Habaguanex concibió las Cenas de Gala para saborear un menú exquisito al mismo tiempo que participan de espectáculos de jerarquía.
Estas cenas se organizan especialmente para celebrar el Fin de Año, pero pueden hacerse para grupos a solicitud de la agencia de viajes en cualquier otro momento.
Un menú clásico comienza con una gran variedad de cocteles, donde el Mojito ocupa un sitio de honor. Le sigue luego una entrada como galantina de pavo con salsa de manzana y champagne; un plato principal que puede ser lomo de ternera con champignones y frutos secos con papas al olivo y romero, vegetales y ensaladas. Las bebidas incluyen agua mineral, jugo de frutas, refrescos, cerveza, vino blanco, rosado, tinto y espumoso, ron añejo y coctelería cubana. Té y café cubano y turrones españoles.   
Los sitios elegidos para su desarrollo son: Plaza de La Catedral, Plaza de San Francisco y la Plaza Vieja.  

Las Plazas
La Plaza de la Catedral es uno de los conjuntos arquitectónicos más armoniosos de la época colonial. Rodeada de palacios del siglo XVIII, está dominada por la Catedral de San Cristóbal, que presenta, entre dos torres asimétricas, una notable fachada barroca, considerada una de las más hermosas de América Latina.
La Plaza de San Franciso se ubica frente a la la iglesia y convento de San Francisco de Asís construidos a fines del S. XVI. Es la segunda de la ciudad por su antiguedad.
La Plaza Vieja fue construida a mediados del S. XVI. Fue enseguida una plaza muy comercial, donde ricos mercaderes se hicieron construir hermosas mansiones. Una decena de ellas han sido reno