Desde la AHT sostienen que en las principales ciudades del mundo como Barcelona, New York, Roma y Ámsterdam, el origen de las tasas de pernocte surgió luego de lograr los objetivos turísticos deseados para que la actividad sea sustentable a lo largo de todo el año.

"Si bien nuestro país ha crecido en demanda de turismo extranjero en los últimos años, aún estamos lejos de alcanzar el número de turistas necesario para lograr la atemporalidad", opina el comunicado emitido por la institución.

La negativa radica en que consideran que agregar una tasa a los turistas extranjeros en un momento en que la actividad está en pleno desarrollo, no haría más que encarecer los servicios, "contradiciendo la política a nivel nacional oportunamente reglamentada sobre la devolución de IVA al turista extranjero".

Incluso, desde la asociación subrayó las diferencias que hay entre Buenos Aires y los principales centros turísticos del mundo: "No hay que perder de vista que Buenos Aires tiene altos costos de acceso, y una reducida conectividad con respecto a las ciudades que hoy ya lo cobran".