Roberto Colaninno, el presidente de Alitalia, dimitirá de su cargo al frente de la aerolínea de bandera italiana, una vez que la compañía aérea culmine su proceso de recapitalización, que incluye la ampliación de capital por 300 millones de euros.

El directivo indicó que renunciará a su cargo, junto con todo el consejo de administración, y no aceptará ningún cargo ejecutivo dentro de la compañía.
Los accionistas de Alitalia tienen de plazo un mes para acudir a la ampliación de capital, aprobada el pasado 15 de octubre a propuesta del consejo de administración.
“Después de haber finalizado el proceso de recapitalización, voy a renunciar oficialmente de mi posición, junto con todo el Consejo de Administración, y ya no buscaré ningún cargo ejecutivo dentro de la empresa”, ha asegurado Colaninno.
El consejo de administración de Alitalia en bloque, ante el posible cambio en la titularidad, ya anunció su intención de dimitir de forma “irrevocable” durante la próxima reunión que se celebrará después de la suscripción definitiva de ampliación del capital.

Pendientes de Air France-KLM
Los consejeros representantes de Air France-KLM, accionista mayoritario de Alitalia con el 25% del capital, han apoyado el plan de contingencia para que la aerolínea siga funcionando, si bien no han confirmado que el grupo franco-holandés vaya a suscribir la ampliación. De hacerlo, podría inyectar una inversión de 55 millones de euros.
Alitalia buscará un socio diferente si su mayor accionista, Air France-KLM, no participa de un aumento de capital para salvar a la compañía aérea deficitaria, dijo el ministro italiano de Transporte, Maurizio Lupi en declaraciones al diario ‘Corriere della Sera.
La ampliación de capital, aprobada el pasado viernes por el consejo de administración aerolínea, forma parte del plan de rescate de 500 millones de euros liderado por el Gobierno italiano para salvar la aerolínea cerca de la bancarrota, inyección a la que se sumarán otros 200 millones de euros en nuevas líneas de crédito con la banca.
Alitalia registró un beneficio neto de explotación (Ebit) negativo de 162 millones de euros en los nueve primeros meses del ejercicio, frente a un resultado positivo de 119 millones de euros en el mismo periodo de 2012.
En el tercer trimestre, el beneficio neto de explotación de Alitalia fue de 7 millones de euros, frente a los 27 millones registrados en el mismo período del año anterior.
La aerolínea italiana ya estuvo en 2009 al borde de la bancarrota y fue salvada por un grupo de unos 20 inversores privados italianos y