La séptima edición de la Noche de los Museos se desarrolló anoche y esta madrugada en la ciudad de Buenos Aires con una masiva asistencia de turistas y porteños a los 170 espacios de arte y cultura que mantuvieron abiertas sus puertas hasta las 3 de la mañana.
Fuentes oficiales estimaron que entre las 20 del sábado, horario en que comenzó el evento, y las tres de la mañana del domingo, unas 540 mil personas habrían formado parte de la iniciativa, que se inspira en una idea que comenzó en la ciudad alemana de Berlín en 1977.
"El evento se ha convertido en un clásico que permite apreciar con todo esplendor la riqueza cultural y la historia de Buenos Aires", dijo el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, durante la presentación de la actividad en el planetario Galileo Galilei.
Por su parte, en el Museo de Arte Latinoamericano (MALBA), el ministro de Cultura porteño, Hernán Lombardi, definió a La Noche de los Museos como "una fiesta popular y del patrimonio, una celebración de la cultura".
"Tenemos también la participación del Bus Turístico, que con cuatro unidades hace de manera gratuita el recorrido de Milla Museos", señaló. Además, 78 líneas de colectivos ofrecían viajes gratuitos a quienes recorrían algunos de los puntos de interés distribuidos en 19 barrios de la Ciudad.
Pasadas las 22:30, una cola de una cuadra se había formado en la manzana de la Legislatura porteña, situación que se repetía frente a otros edificios públicos de la ciudad.
Cerca de 170 espacios de arte de la ciudad abren sus puertas para ofrecer exposiciones, visitas guiadas, cine, video, danza, teatro, talleres, charlas y música en vivo, como el evento central de la noche en la vieja cervecería Munich con la Compañía de Danza Aérea de Brenda Angiel, una puesta multimedia fascinante que lleva a los límites la típica danza porteña.
Se presentan los tangos aéreos "Condición Aérea" y "8cho", en el que luces y música visten los jardines y la fachada del emblemático edificio de la Costanera Sur (Avenida de los Italianos 851) con escenarios mágicos, entre bailarines suspendidos en sogas y arneses.
"Esta actividad une la idea de fiesta popular con una fiesta del patrimonio", señaló el ministro de Cultura porteño, Hernán Lombardi, durante la presentación para la prensa, con referencia al evento.
Los barrios de Pompeya y Villa Crespo se incorporaron este año al circuito artístico, una de las celebraciones ineludibles del calendario cultural local que incluirá también teatro en la Casa de la Cultura (Avenida de Mayo 575), performances en el Museo de Arte Hispanoamericano Isaac Fernández Blanco (Suipacha 1422) y shows de luces y sonido en los túneles del Museo Santa Felicitas (Pinzón 1480).
El arte contemporáneo es el eje temático de este esperado encuentro que cada año ostenta larguísimas colas en los ingresos a sitios como el Malba, el Cabildo, el Museo Nacional de Bellas Artes, el Palacio San Martín (sede de la Cancillería Argentina), el Centro Cultural Recoleta o el Museo de Arte Decorativo, por mencionar algunas de las ya clásicas paradas en el recorrido.
"Esta séptima edición, con sus muy diversas propuestas sustentadas en el criterio de excelencia, ratificará nuevamente a Buenos Aires como una de las principales ciudades de arte del mundo", agregó Lombardi.