Desde hace varios días la empresa, Crucero del Norte, denuncia un impedimento en la prestación de servicios por parte de la Municipalidad de Iguazú, el cual se da “sin motivo aparente”. 

Este conflicto se desarrolla sobre la Ruta Nacional 12. Los efectivos de seguridad vial de dicha municipalidad, antes de que los autobuses entren a Parque Iguazú, detienen la circulación de este servicio dejando varados a los pasajeros sin cumplir completamente el recorrido. 

Al respecto, Flavio Nicolino, gerente de Relaciones Institucionales de la firma, le explicó a Mensajero: “Luego de que el servicio vuelve de Foz do Iguazú para entrar en lo que es cataratas del lado argentino, habiendo completado migraciones sin ningún problema, se encuentran de 6 a 10 oficiales de tránsito que hacen descender a los pasajeros”. 

De esta manera, también hizo hincapié en que el recorrido, que transporta turistas nacionales y extranjeros, está autorizado por el Ministerio de Transporte y la Secretaria de Transporte; y que, a su vez, la prestación del servicio se encuentra amparada en el Acuerdo Bilateral con la República Federativa Brasil, el cual habilita la extensión de la línea a los parques nacionales. 

Al ser un acuerdo de servicio de transporte internacional entre los países, desde la empresa explican que la jurisdicción de las autoridades municipales no estarían habilitadas para ejercer esta interrupción. Sin embargo, desde el 1.° de agosto, los recorridos son demorados y cancelados con el motivo de hacer cumplir la carta municipal.

En este contexto, en el que el conflicto sigue escalando, el director de Transporte del Ministerio de Transporte de la Nación, Alejandro Storello envió una carta intimando al intendente, Claudio Raúl Filippa, a esclarecer la situación, ya que Crucero del Norte cumplía con todas las autorizaciones correspondientes. 

Al respecto Nicolino expresó que las autoridades del municipio “son intransigentes”, por lo cual no acusan recibo de su falta de poder frente a este servicio. Como respuesta, el Ministerio de Transporte respaldó los permisos habilitados y aconsejó a la empresa iniciar acciones legales, por lo cual ya se realizaron todas las presentaciones del caso.

De igual manera, genera preocupación la cadena de problemas que esto ocasiona: los conductores no quieren realizar la ruta por las actas de tránsito que no les permitirían renovar la licencia de conducir; la cancelación del servicio por parte de los pasajeros, la pérdida de los mismos para la empresa y el incumplimiento de un acuerdo internacional. 

El jueves, y tras la denuncia de los viajeros por abandono de persona, la municipalidad dispuso un colectivo de la empresa Río Uruguay para transportar a todos aquellos pasajeros que quedaban varados por la retención de los vehículos de Cruceros del Norte.