Entre el 20 y el 30 de noviembre, la ciudad recibirá a viajeros de la capital provincial. Servirá para evaluar los protocolos antes de la apertura definitiva.

Los diferentes destinos del país se van poniendo a punto para la temporada de verano, que este año será totalmente distinta a cualquier otra que hayan vivido. Por eso, muchos de ellos ya están ultimando detalles para iniciar pruebas piloto con pequeñas cantidades de turistas de regiones cercanas para evaluar el funcionamiento de los protocolos antes de dar el paso hacia la apertura definitiva. Ese es el caso de El Calafate, que recibirá a viajeros provenientes de Río Gallegos entre el 20 y el 30 de noviembre.

En diálogo con Mensajero, Oscar Souto, secretario de Turismo de El Calafate, confirmó que sólo se permitirá el ingreso de pasajeros que lleguen desde la capital provincial y avisó que habrá restricciones en cuanto a la cantidad y a las condiciones de la estadía: "De domingo a miércoles se permitirán 100 personas por día, mientras que de jueves a sábado podrán entrar 200 turistas diarios. En todos los casos, se pueden quedar un mínimo de dos noches y un máximo de cinco".

La noticia había sido anunciada en la semana por Silvina Córdoba, ministra de Producción, Comercio e Industria de Santa Cruz, durante una nota con LU12 AM680. La funcionaria aseguró que esta iniciativa fue una decisión política de la gobernadora Alicia Kirchner y que surgió luego de la evaluación realizada junto al intendente de El Calafate, Javier Belloni, sobre la apertura del Parque Nacional Los Glaciares.

En la semana, el ministro de Turismo y Deportes de la Nación, Matías Lammens, había adelantado que otros destinos nacionales, como El Calafate y Puerto Iguazú, podrían empezar a recibir turistas provenientes de países limítrofes en el corto plazo. Consultado sobre esta posibilidad, Souto indicó que todavía no la tenían como confirmada.