Los empresarios turísticos del país trasandino dijeron que "si no hay apertura la temporada va a ser un desastre" y exigieron medidas al Gobierno de Sebastián Piñera.

Con la temporada de verano iniciada, en Chile comienza a aflorar la preocupación por la falta de definiciones del Gobierno que encabeza Sebastián Piñera en torno a la apertura de las fronteras para que ingresen turistas internacionales. Si bien el ministro de Economía, Lucas Palacios, adelantó que están analizando de qué manera hacerlo, los empresarios de la industria ya perdieron la paciencia.

"Necesitamos tener noticias esta semana. Para nosotros es algo clave. Si no hay apertura la temporada va a ser un desastre", sostuvo Helen Kouyoumdjian, presidenta de la Federación de Empresas de Turismo (FEDETUR). A diferencia de lo que ocurre en Argentina, allí la temporada alta para el arribo de extranjeros comienza en octubre, por lo que consideran que ya se perdió un mes completo.

La dirigente gremial celebró las declaraciones de Palacios y dijo que son una "muy buena noticia", aunque recalcó que se viene hablando del tema desde hace tiempo y que hasta el momento no se logró ningún avance. "Debemos considerar que los turistas no van a llegar al día siguiente de abrir. Tenemos que comunicar eso y que se activen las reservas. Entonces hay un cierto rezago a considerar. Si queremos tener pasajeros en diciembre hay que comenzar a comunicarlo hoy", resaltó.

Más allá de los terribles efectos de la pandemia, que ya causó la pérdida del 50% de los puestos laborales en el sector, el turismo chileno viene sufriendo desde mediados de 2018, cuando la devaluación del peso argentino generó una importante caída en la afluencia de pasajeros internacionales. Eso se agravó en 2019 con el estallido social que derivó en una serie de violentas manifestaciones y enfrentamientos de la gente con los carabineros.