La Autoridad de Turismo y el Ministerio de Salud implementaron protocolos para crear un destino seguro que pueda recibir viajeros internacionales.

Panamá confirmó que, a partir del 12 de octubre, tendrá sus fronteras abiertas para viajeros internacionales sin restricciones según el país de procedencia. Con ese objetivo, la Autoridad de Turismo de Panamá ha trabajado en estrecha colaboración con el Ministerio de Salud  en normativas para mantener seguros tanto a los visitantes como a las comunidades locales en todo el destino.

“Después del cierre de nuestras fronteras a finales de marzo, estamos emocionados en dar nuevamente la bienvenida de una manera segura, a los viajeros que deseen visitar Panamá”, dijo el administrador de la Autoridad de Turismo, Ivan Eskildsen. “Los nuevos protocolos de salud y bioseguridad reflejan nuestro arduo trabajo y nuestra dedicación para proteger tanto a los panameños como a nuestros visitantes y, a través de estos esfuerzos, hemos obtenido el sello de aprobación del Consejo Mundial de Viajes y Turismo - Safe Travels. Nuestro hermoso país, rico en naturaleza, biodiversidad y cultura, está nuevamente listo para ser descubierto”.

Los viajeros entrantes, así como también los propios panameños, deben presentar una prueba de antígeno o PCR COVID-19 negativa, la cual debe realizarse con no más de 48 horas antes de la llegada. Asimismo, si la prueba de COVID-19 de un pasajero tiene más de 48 horas de haber sido realizada, el viajero deberá hacerse una prueba rápida en el aeropuerto antes de pasar aduana y será responsable de su costo.

De esta manera, Panamá obtuvo el Sello de Viaje Seguro del Consejo Mundial de Viajes y Turismo. También con el apoyo de la Organización Mundial del Turismo de las Naciones Unidas, la iniciativa se centra en los esfuerzos mejorados de seguridad necesarios para restablecer la confianza de los viajeros en todo el mundo.