Esta medida es parte del plan que cuenta con una docena de etapas y que referentes del Gobierno porteño adelantaron que se implementará desde el lunes. 

El fin de semana comenzó a circular un documento que contenía el plan para el regreso de las múltiples actividades en la Ciudad de Buenos Aires.

En las primeras horas de ayer, el vicejefe de Gobierno de CABA, Diego Santilli, confirmó que este esquema es real y es en el que están trabajando desde hace un tiempo con el objetivo de proyectar la salida de la cuarentena. 

Si bien en un principio se pensó que este iba a ser un desdoblamiento de lo que iba a hacer la provincia de Buenos Aires, al parecer las medidas irían en una sintonía similar. Además, Santilli adelantó que este plan será presentado en las próximas horas al Gobierno de la Nación, con la intención de que la primera fase comience el 20 de julio.

De esta manera, el lunes sería el retorno de los runners, los comercios de cercanía, las galerías barriales en áreas “no conflictivas”, las mudanzas y los paseos recreativos diarios para niños y adolescentes.

Es importante resaltar que el resto de las etapas no tienen una fecha confirmada ya que, tal como explicaron desde el Gobierno de la Ciudad, dependerá del desarrollo de la curva de contagios. 

Por lo tanto, en lo que se vincula de manera directa al turismo, en fase 4 habrá un nuevo incremento en la capacidad de los espacios culturales (hasta 30 personas), estará permitida la gastronomía en espacios exteriores y con materiales descartables. Ya para la siguiente etapa, pevén la apertura del Jardín Botánico y la Reserva Ecológica. Los espacios culturales subirán el límite a 40 personas. Mientras que tendrán que pasar dos fases para que se evalúe si se abrirá el Ecoparque.

Para las últimas tres instancias quedará la discusión de protocolos para el retorno de actividades con público de hasta 1000 personas. Además, habilitarán los negocios gastronómicos interiores al 50%. Y, como última medida, a la par de la normalización de los eventos masivos y las reuniones sociales, se permitirá la apertura de los locales nocturnos, y volverán el 100% de la gastronomía y la hotelería.

Con este panorama, el escenario para el sector en la Ciudad de Buenos Aires se presenta complejo pero al menos hay un horizonte, que es lo que viene pidiendo el empresariado hace mucho tiempo.