Según datos de una encuesta de Invertur, ocho de cada diez empresas del sector renovarán el formato de sus productos y servicios a raíz de la crisis. 

La pandemia trastocó el mundo tal como se conocía. Ya no hay ninguna novedad en ese enunciado. La crisis sin precedentes desatada por el coronavirus dejará cambios radicales en la vida cotidiana y, por supuesto, también afectará a la manera de hacer negocios. El turismo no será la excepción y deberá adaptar sus estructuras para acomodarse a este renovado escenario. Por eso, la comunidad de inversores turísticos Invertur organizó la semana pasada un foro con funcionarios provinciales y regionales, quienes brindaron su opinión acerca de los desafíos a futuro. Durante el encuentro virtual también se difundió una encuesta que realizó la empresa organizadora, en la que quedaron plasmadas las tendencias que se posicionarán con fuerza en los próximos meses a nivel desarrollo de producto y ventas.

Consultadas sobre si tenían decidido readaptar o innovar en su oferta a raíz de la pandemia, 8 de cada 10 empresas respondieron afirmativamente. El 51% dijo que las modificaciones estarán orientadas a darle un nuevo aire al plan de marketing con foco en el canal online, mientras que un 21% aseguró que pondrá el acento en el aspecto sanitario. Por último, un 14% indicó que tendrán que ajustar los precios y el 14% restante sostuvo que deberán encarar un proceso de digitalización.

Por las restricciones a la circulación y el masivo cierre de fronteras a nivel mundial, es casi obvio que los primeros mercados en retomar la actividad serán el local y luego el nacional. Los viajes regionales e internacionales, por supuesto, quedarán para una última instancia. En ese contexto, con un 93% de los encuestados que piensa que el turismo interno será el que impulse la recuperación, desde Invertur destacaron tres datos clave para que las empresas del rubro reformulen sus productos. En primer lugar, resaltaron que 7 de cada 10 dólares del consumo turístico global corresponden a viajes dentro de cada país, mientras que 8 de cada 10 turistas en Latinoamérica son internos. Por último, remarcaron que la industria tendrá una gran oportunidad en esta salida de la crisis, ya que el turismo emisivo necesariamente se reconvertirá a turismo interno.