Dos vuelos especiales de la compañía aérea permitieron el regreso de casi 900 personas a sus países de residencia.

Dos nuevos vuelos de Air France permitieron el regreso de casi 900 pasajeros desde y hacia Argentina. La semana pasada, un nuevo grupo de argentinos regresó al país en el vuelo AF4144 de la compañía aérea, que partió de París el jueves 30 de abril por la noche.

A bordo del Boeing 777-300, viajaron 397 personas, argentinos y residentes. En su retorno a París, el avión de Air France transportó a 475 pasajeros, principalmente franceses y holandeses, incluyendo a 10 bebés. Estos vuelos fueron organizados por Air France KLM en colaboración con el Ministerio de Relaciones Exteriores argentino y las Embajadas de Francia y de los Países Bajos en Argentina.

“Estamos muy orgullosos de haber facilitado el regreso a sus hogares de casi 900 personas con estos dos vuelos especiales de repatriación, el jueves 30 de abril desde París y el domingo 3 de mayo desde Buenos Aires. Estos vuelos se suman a los otros nueve vuelos operados por Air France y KLM desde y hacia Buenos Aires a partir del 17 de marzo. Para nosotros es una gran satisfacción poder seguir asistiendo a nuestros pasajeros y a los gobiernos de los países en los que operamos en estos momentos difíciles, y seguir prestando servicios esenciales, como el transporte de pasajeros y carga”, comentó Nathalie Larivet, Gerente General Air France KLM en Argentina.

Más medidas de protección
Air France aclaró que le pedirá a sus pasajeros que utilicen una mascarilla en todos sus vuelos a partir del 11 de mayo de 2020. Los clientes serán notificados de esta obligación antes de su partida y serán invitados a traer uno o más protectores.

Esta medida complementa el dispositivo ya implementado por Air France, que incluye, entre otras medidas:

  • El uso obligatorio de mascarillas por parte de la tripulación y los agentes en contacto con los clientes.
  • La adaptación del recorrido del cliente en los aeropuertos con la aplicación del distanciamiento físico, siempre que sea posible.
  • La aplicación del distanciamiento físico a bordo siempre que sea posible. En la mayoría de los vuelos, las bajas tasas de ocupación actuales permiten que haya una distancia entre los pasajeros. En los casos en los que esto no es posible, el uso de mascarillas por parte de todos los pasajeros y de la tripulación garantiza la protección sanitaria adecuada.
  • Refuerzo de los procedimientos diarios de limpieza de los aviones, con la desinfección de todas las superficies en contacto con los clientes.
  • Un procedimiento específico de desinfección periódica de los aviones, mediante la pulverización de un producto virucida homologado.
  • La adaptación del servicio a bordo para limitar las interacciones entre los clientes y los miembros de la tripulación: suspensión del servicio de alimentos y bebidas en vuelos cortos y preferencia por productos envueltos en film o embalados individualmente en vuelos de larga distancia.

Además, el aire en la cabina de los aviones de Air France se renueva cada 3 minutos con filtros “High Efficiency Particulate Air” (HEPA), idénticos a los utilizados en quirófanos. Estos filtros extraen más del 99,99% de los virus más pequeños, incluidos aquellos cuyo tamaño no supera los 0,01 micrómetros, lo que garantiza la conformidad del aire de la cabina con los estándares de calidad. Los virus de tipo coronavirus, cuyo tamaño va de los 0,08 a 0,16 micrómetros, son filtrados por los filtros HEPA.

Para Air France, la salud y la seguridad de sus clientes y su personal constituye un imperativo absoluto. Todo el personal de la compañía está movilizado para garantizar a sus clientes el mejor nivel de seguridad sanitaria y garantizarles así un viaje con tranquilidad.