Aldo Elías, presidente de la CAT, analizó el panorama del sector en "Charlas de turismo", el ciclo de entrevistas en vivo por Instagram de Mensajero.

¿En qué momento se encuentran hoy, con casi un mes de cuarentena, las empresas del sector?

-Es uno muy difícil. Es fácil demostrar dónde estamos parados porque los números son contundentes. Estamos cerrados desde mediados de marzo, desde que el presidente prohibió el alojamiento en los hoteles por el fin de semana largo. Luego vino la cuarentena. Para esa época ya habíamos tenido cancelaciones de reservas del exterior y eventos suspendidos. Estamos en un escenario de 35 o 40 días de paro y probablemente seguiremos, por lo menos, hasta las vacaciones de invierno.

¿En tus años en la actividad viste algo parecido a esto?

-No, nunca. Jamás el mundo estuvo tan comprometido como hasta ahora. Nosotros la venimos llevando bastante bien en término de muertes y contagios, pero a nivel internacional esto es un desastre.

¿Qué es lo que más les inquieta hoy a los empresarios del rubro?

-La mayor preocupación es cómo hacer para no cerrar y que se sostengan los puestos de trabajo. En una situación de ingresos cero, y sin acompañamiento del Gobierno, es imposible llegar a la orilla.

¿Ves un horizonte del que agarrarse o esto es aguantar a ciegas hasta volver a trabajar?

-Es una pregunta que nos hacemos seguido. Ahora estamos comprometidos en frenar el contagio. No hay posibilidades de analizar otra cosa. Pensar en el día de mañana y cómo va a ser la promoción es una irrealidad absoluta, porque no sabemos de cuándo estamos hablando. Al desconocer eso, tampoco tenemos noción de cuántas empresas seguirán en pie. Escuché algunas propuestas de "compre hoy y viaje mañana" que me generan serias dudas. Si te vendo un hotel para el verano en la Costa Atlántica, no sabemos si ese alojamiento llegará a destino o si la agencia que participó de la venta no se quedó en el camino. El gran desafío es pensar esto: si la curva se está corriendo para fines de mayo, ¿levantamos la cuarentena? Entonces hagámoslo mañana, porque si el pico va a ser recién para junio nos empezamos a mover un poco ahora y luego vamos parando, pero no se va a hacer eso. Se va a sostener hasta el 27 de abril, aunque seguro llegarán hasta el 4 de mayo porque el viernes 1° es feriado. Entonces te quedás a más de 20 días del pico. Eso me parece más importante que salir a decirle al mundo que Argentina es un país que se puede visitar.

¿Por qué dicen que la pandemia afectó a turismo de una manera diferente a cualquier otro rubro?

-Ese fue el principal motivo por el que nos acercamos a Olivos. El presidente de la Nación y los ministros de Turismo y Deportes, de Desarrollo Productivo, del Interior y la secretaria de Turismo tuvieron la excelente idea de recibirnos y lo agradecemos enormemente. Queríamos explicarle que fuimos el primer sector afectado por la pandemia y el último en salir. Para colmo, en la gran cruzada que hubo para evitar que la curva siga creciendo, nos encontramos con que el factor miedo tuvo mucho que ver. Se trabajó mucho sobre el temor de contagiarnos en la calle. Eso mismo es lo que retrasará muchísimo la vuelta al ruedo del turismo como actividad económica. Una vez que se levanten las restricciones, ¿cuántos se van a animar a subirse a un avión y sentarse al lado de una persona que no saben si está enferma? Este factor jugará fuertemente en contra de la recuperación del sector. ¿Qué habría que decidir? ¿Que los aviones y hoteles no superen el 50% de ocupación? ¿O que los restaurantes atiendan a la mitad? Probablemente, muchas de esas actividades no puedan llevarse a cabo porque las empresas trabajarían a pérdida. Por eso, le pedimos acompañamiento para pagar sueldos porque no podemos tomar créditos con ese objetivo. Podemos hacerlo a tasas bajas y en plazos largos de devolución para capital de trabajo. Endeudarte para pagar salarios se puede sostener sólo unos meses. Entonces sería preferible quebrar de entrada y no hacerlo al poco tiempo.

¿Ven factible que el Gobierno les otorgue créditos a tasa 0%?

-En un país con 60% de inflación suena raro que puedas conseguir eso. La tasa del 24% es buena, pero el inconveniente es que de cada seis empresas que llegan a un banco, solamente una consigue un préstamo. Lo curioso es que el Estado está ofreciendo garantía total, así que el banco no asume ningún riesgo. En todo caso, lo hace el Gobierno. Aún a pesar de eso, no se consiguen.

Aldo Elías dialogó en vivo por Instagram con Mensajero (@mensajero_turistico)
Aldo Elías dialogó en vivo por Instagram con Mensajero (@mensajero_turistico)

¿Cuántos puestos de trabajo están hoy en riesgo y cuál es la pérdida promedio de las empresas por este parate?

-Lo segundo es incomensurable. Por otro lado, de 1.000.000 puestos de trabajo directos e indirectos, están en riesgo por lo menos la mitad. Es un número importantísimo y ese es uno de los comentarios que le hicimos al presidente. Lo peor que nos puede pasar es salir de la pandemia con las compañías quebradas y recursos humanos que no tengan dónde trabajar.

¿Y qué les dijo Alberto Fernández ante todos esos comentarios?

-Nos fuimos muy contentos de la reunión. Entendió perfectamente nuestra problemática. Por eso les pidió a Kulfas y Lammens la conformación de una mesa de trabajo urgente para diagramar soluciones al problema económico de la industria turística, refiriéndoles que las medidas adoptadas hasta este momento no le servían al sector. El objetivo estuvo logrado en ese aspecto.

Le pidieron al Gobierno que se haga cargo de la totalidad de los salarios. ¿Eso se debe a que la ayuda que brinda el Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción es insuficiente?

-Ese pedido se lo hicimos. No es fácil que vaya a ocurrir, pero no vemos ninguna otra alternativa. No se pueden sacar créditos para sueldos, estamos convencidos. Acá hay que hacer un acuerdo de partes entre Estado, sindicatos, empresarios y empleados. Todos vamos a perder, el tema es que sea lo menos posible y que no quede un muerto en el camino. Nosotros podemos pagar el 100% de los salarios un mes, pero después de eso tenemos que quebrar, y eso no le sirve al Gobierno, a los sindicatos ni a los empleados. El Estado tiene que proteger al sector privado al precio que sea, porque es el que le va a permitir que el porcentaje de desocupación no se vaya al 17% o 20% y que la rueda empiece a girar nuevamente. Ir contra eso sería de locos.

¿En materia impositiva solicitaron una postergación de seis meses y luego una moratoria?

-Nosotros le explicamos al presidente que, en el cálculo más optimista, el 2020 está perdido. Cuando hablamos de diferir impuestos por seis meses, hay que tener en cuenta que ya llevamos un mes sin actividad. Al referirnos a medio año, estamos pensando un escenario en el que no tendremos trabajo. Entonces, ¿de qué pago de impuestos se puede estar hablando? No tendría lógica. ¿Qué sentido tiene estar abonando el impuesto a los débitos y créditos bancarios si tenés que seguir haciéndote cargo de todos los otros gastos que la actividad te demanda, como alquileres y servicios?

"A Alberto Fernández le explicamos que el 2020 está perdido"

¿Están al tanto de los diferentes proyectos de ley que surgieron en el Senado, recamando medidas para salvar al turismo?

-Estuvimos hablando con el senador Maurice Closs en lo previo a su proyecto y estamos en un 100% de acuerdo con lo que plantean. La industria turística tiene que estar declarada en emergencia. Sobre eso tratan la mayoría de estos proyectos y no hay dudas de que esto debe ser así.

¿Pensás que el mercado quedará más concentrado cuando todo esto termine?

-Creo que habrá una caída fuerte de la cantidad de empresas en el sector. Esto no es bueno, pero no pienso en una concentración. Será una etapa para reconstruir y empezar de cero. Es difícil imaginar, porque el porcentaje de pérdida será de una manera si esto dura dos meses, pero el número será diferente si dura seis.

¿Están pensando en algún protocolo de viajes para cuando se pueda volver a la actividad?

-Por ahora no. La preocupación actual es cómo transitar la cuarentena y adaptarnos a esta nueva realidad. Habrá muchos temas que debemos resolver para entender cómo va a ser todo de acá en adelante. ¿El desayuno buffet en los hoteles va a desaparecer? ¿Los asientos uno al lado del otro en los aviones también cambiarán? Esto traerá modificaciones radicales en la forma de vincularnos y en muchos modelos de negocios asociados al turismo.

¿Qué mensaje le podés dar a los empresarios y empleados de la industria que están preocupados por este complejo escenario?

-Estamos ante un momento y posibilidad históricas. Debemos eliminar todo tipo de grietas en nuestra sociedad, aunque sé que es difícil porque siempre dividimos todo a la mitad. Es el momento de trabajar en equipo. Por eso, rescato que el presidente haya dicho que "nadie se salva solo". Lo único que le permitirá superar esta crisis a nuestra industria es trabajar con el Gobierno, sindicatos, empresarios y empleados. No creo que esta tormenta no vaya a pasar. Soy un convencido de que estamos siendo testigos de un desastre, pero que vamos a vivir para contarla. Si entendemos que el que tenemos al lado es nuestro par, podremos levantarnos antes. Hay que confiar en que se pueda encontrar un tratamiento médico y darle para adelante.