Ante la imposibilidad de desembarcar en puertos franceses, mil argentinos a bordo del crucero Costa Pacífica exigen ser repatriados desde Génova.

El coronavirus acecha y Europa es uno de los más afectados por el virus que tiene en vilo a la población mundial. Cada día, la pandemia suma nuevos casos fatales a sus filas y la paranoia de aquellos que habitan el Viejo Continente -justificada, por cierto- se acrecienta más y más.

En ese marco, el 3 de marzo iniciaba su recorrido en Buenos Aires el crucero Costa Pacífica con destino a la ciudad italiana de Génova. Luego de recorrer las costas de Maceió, en Brasil, la embarcación zarpó con destino a las Islas Canarias, pocas horas anes de que los puertos españoles se cerraran a causa de la incipiente expansión del coronavirus. "Se habló con el capitán para tratar de regresar a América, pero nos dijo que no era posible, porque había un plan de navegación que ellos debían cumplir", explicó el abogado Delfor Maldonado, uno de los pasajeros argentinos desde algún lugar del Mediterráneo.

Luego de este imprevisto, el buque continuó su recorrido hacia Marseille, con la promesa, por parte de la tripulación, de que una vez llegados a la ciudad descenderían para tomar los distintos vuelos hacia sus países de origen. "Pero una vez que llegamos a destino, las autoridades resolvieron dejar bajar únicamente a los franceses residentes. El resto del pasaje no fue autorizado a descender, así que  el capitán anunció durante la noche del 20 que el barco continuaba con destino a Génova", continuó Maldonado. " Pero resulta que como el Estado frances  no proveyó al barco de provisiones necesarias, el barco está navegando en el Mediterráneo con buen ritmo, pero desabastecido de agua y en condiciones que ya empiezan a ser precarias".

Los pasajeros estiman que en cuanto lleguen a Génova, serán trasladados al aeropuerto de Roma-Fiumicino o directamente  a Argentina. "Estamos tranquilos, pero con una enorme incertidumbre y con la esperanza de que el Estado argentino nos rescate lo antes que pueda", se ilusionó el abogado.

De todas formas, los turistas denuncian que, por medio de un comunicado emitido durante el trayecto a Génova, el capitán del Costa Pacífica intenta "desligarse de todo tipo de responsabilidad, porque le quieren hacer firmar una documentación como que una vez que los bajan del barco esos ya no son responsables", según explicó una fuente cercana al pasaje.