Cada vez son más los destinos que se adaptan para que grupos vulnerables puedan disfrutar al máximo de su estadía.

Al momento de planificar las vacaciones, son muchas las variables que definen cuál será el destino elegido por el pasajero: los paisajes, la cultura, la gastronomía. Las opciones son tan diversas como lo son los gustos de cada turista. Sin embargo, en otros casos, las posibilidades se limitan a determinados factores que permitan a los viajeros disfrutar de su estadía de la mejor manera posible.

Es que existen determinados grupos vulnerables, como las personas con dificultades motrices, visuales o auditivas, que perciben otro tipo de barreras que reducen el abanico de alternativas para seleccionar el lugar ideal para vacacionar.

En ese contexto, durante los últimos años, muchos destinos turísticos comenzaron a adoptar cambios no solo en sus estructuras edilicias, sino también en las políticas en torno al turismo, tomadas en pos de de favorecer la inclusión de todos en la actividad.

El turismo accesible ya no es una utopía

Una de las ciudades que más se apegaron a las directrices de la Red de Turismo Accesible fue Concepción del Uruguay, que durante los últimos años renovó los sanitarios, las rampas, las camineras y agregó sillas anfibias en dos de sus playas: Banco Pelay e Isla del Puerto. Por otro lado, muchos de sus restaurantes cuentan con cartas en braile y, además, desde Turismo se realizó un trabajo en conjunto con el área de bromatología y salud de la municipalidad para que los establecimientos gastronómicos cuenten con menús para celíacos.

“Hoy hablar de discapacidad es hablar de algo un poco más normal. Una persona discapacitada antes se escondía y no disfrutaba”, indicó a Mensajero María Laura Saad, Directora de Turismo de Concepción del Uruguay.

Además, la funcionaria agregó: “Este año nos permitimos pedir a Nación la posibilidad de acceder a un trabajo que tiene que ver con las directrices de calidad en accesibilidad”. En la ciudad, para esta época de Carnavales, se estableció un sector especial para personas con discapacidad y para la Fiesta Nacional de la Playa se adaptó un espacio de madera para quienes se encontraban en silla de ruedas.

El turismo accesible ya no es una utopía

Puerto Madryn es otro de los destinos turísticos que muestran un desarrollo en torno a la accesibilidad. Actualmente cuenta con alojamientos (hoteles y campings) que han adecuado su espacio y sus servicios para que puedan ser usados por personas con discapacidad. Pero también presentaron nuevas implementaciones en relación a las excursiones, como el buceo adaptado. “La gente que llega a la ciudad con alguna discapacidad y se encuentra con que puede realizar la actividad, se va muy contenta”, señaló Leonardo Pellizzari, encargado del área de accesibilidad de la Secretaría de Turismo de la localidad patagónica.

La intención del organismo es que el viajero pueda recorrer Puerto Madryn de manera independiente y sin barreras. Esta premisa ha llevado a que, a partir de la gente que llega a los centros de Atención al visitante, la Secretaría haya podido notar en los últimos años que hubo un incremento en la cantidad de personas con algún tipo de discapacidad que llegan a la ciudad.

“Es satisfactorio ver que la gente que llega al destino se vaya con una sonrisa porque puede hacer todo tipo de actividades y recorrer las áreas naturales protegidas como Península Valdés, Puerto Pirámides, la pingüinera en Punta Tombo y más”, sintetizó Pellizzari.

El turismo accesible ya no es una utopía

En este marco, Alejandro López, director y fundador de la Red de Turismo Accesible, resaltó que "es necesario que se abran estos espacios en las diferentes gestiones para un desarrollo serio de la actividad. Es una obligación por parte del Estado aplicar las leyes nacionales como la 26.378 Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad".