En la mayoría de los destinos se vislumbra un incremento de precios de entre el 10 y el 15 por ciento respecto de la temporada anterior. Ante la situación, el sector público y privado, en acciones sinérgicas, viene desarrollando tareas de promoción y bonificación.

La temporada de verano significa para los principales destinos turísticos del país, el momento para hacer la diferencia. Los prestadores de servicios turísticos invierten y trabajan todo el año para luego, una vez comenzado enero, recibir a los turistas ávidos de consumo. El turismo interno, en este contexto de crisis que afecta no sólo a nuestro país sino también y por ello es más grave aún para la actividad, a los principales centros emisores extranjeros para Argentina, se ha convertido en la nueva meta de los destinos nacionales.
Se ha dicho muchas veces desde estas páginas pero no está de más repetirlo: el turismo y sobre todo el turismo interno es una industria generadora de recursos y dividendos, uno de los motores esenciales de las economías domésticas. Hoy, y por una contingencia, nuevamente se lo está poniendo en el rol protagónico que nunca debió haber abandonado.

¿Y ahora qué hacemos?
La crisis planteó un nuevo estado de situación, pero no todos los males nacieron fuera de nuestras fronteras. Argentina viene sufriendo un proceso inflacionario que, más allá de las artimañas que los gobernantes inventan para disfrazar, en la cotidianeidad se ve y se siente cada vez más. La inflación afecta de manera regular a todas las actividades e industrias siendo el turismo uno de los sectores más sofocados por este proceso.
Por su parte el consumidor, que también sufrió la inflación en carne propia, vive una incertidumbre que le genera vacilación a la hora de decidir vacacionar; sabemos que los gastos suntuosos son los primeros en sentir el filo del metal a la hora del “recorte”.
Ante esto, las carteras gubernamentales de turismo se plantearon, en el mejor de los casos intentar persuadir al sector privado para que absorba las pérdidas y mantenga un nivel de precios lo más cercano posible a lo que las pizarras mostraban la temporada anterior. A su vez, como acción complementaria, incentivan a los prestadores para que lleven a acabo acciones de promoción, como pueden ser descuentos o bonificaciones.
Este medio relevó el estado de situación de tres de los destinos con más afluencia turística en la temporada estival: el Partido de La Costa, Bariloche y Villa Carlos Paz. No queremos decir con esto que sean representativos de su zona ni que su opinión englobe a sus áreas de influencia y mucho menos al país todo. Se trata de indicios, en el mejor de los casos ejemplos y como tal los consideramos.

Partido de La Costa
El secretario de Turismo, Rodrigo Torre, consultado por este medio, indicó: “Hay un compromiso con el sector privado de generar una planificación de las acciones de cara al verano, en este marco hemos diseñado un sistema de promociones y beneficios que alienten al turista  a elegir el Partido de La Costa. En este marco, una inmobiliaria en la Lucila del Mar presentó una campaña que indica que la primera quincena de enero dura 18 días, es decir bonifica tres días; hay hoteles que bonifican una noche, otros que otorgan algún fin de semana fuera de temporada de verano; otros que dan ordenes de compra con el 10 o 15 por ciento de descuento en distintos rubros, o regalan una cena cada tres noches de alojamiento, o entregan vales de nafta si se contrata el servicio por una semana”.
A la vez, Torre marcó que “el sector hotelero se comprometió a no aumentar sus tarifas en más de un 15 por ciento respecto de al temporada anterior”.

El caso de Bariloche
Por su parte, Héctor Barberis, presidente del EMPROTUR de Bariloche, aclaró que “ninguna de las actividades vinculadas al turismo sufrió aumentos de precios, es decir que estamos trabajando con los precios anteriores a la temporada de invierno. Las tarifas nuestras tienen un aumento previo a la temporada de invierno, venimos con tarifas del mes de abril”.
“Algunos de los hoteles de cuatro y cinco estrellas están con ofertas para los grupos familiares, los hoteles de la franja de dos a tres estrellas están con ofertas en el caso de compartir habitación con los hijos, o de acuerdo al día que se alojen.
En los servicios, excursiones por ejemplo, estamos con valores de un año atrás y también hay ofertas para los grupos familiares”, deslizó Barberis refiriéndose a las acciones de promoción.

Villa Carlos Paz
“Si te digo que no aumentaron los precios sería un hipócrita porque más o menos deben estar un 15 por ciento por arriba de la temporada anterior”, manifestó Carlos Azzaretti, secretario de Turismo de Villa Carlos Paz. “En muchos de los casos, este aumento se debe a un incremento real en los insumos”, agregó.
“Todo el empresariado se ha dispuesto a no asustar a la gente. Hay promociones específicas en cada uno de los lugares y viene muy bien el nivel de consultas. Se han puesto de acuerdo, desde los empresarios gastronómicos, los hoteleros y hasta los de espectáculos, que iban a empezar con entradas de 150 pesos y ahora han bajado, y creo que eso ayuda a crear un clima de optimismo”, completó.

El índice Moreno

Mientras tanto, según las cifras del cuestionado INDEC, la inflación descendió a 0,3 por ciento en noviembre. El organismo informó que el Nivel General del Índice de Precios al Consumidor para la Capital Federal y el Gran Buenos Aires acumuló una suba del 7,9 por ciento respecto a igual mes de 2007. En 11 meses subió 6,9 por ciento. Los rubros que más aumentaron en el mes fueron indumentaria y atención médica, con 1,0 y 0,7 por ciento, respectivamente.
Sin embargo, esos aumentos fueron atenuados con los comportamientos más moderados del resto de los componentes de gasto de los hogares, en el que sobresalió la deflación de 0,2 por ciento en el caso de esparcimiento y turismo.