El último fin de semana largo del año, considerado como termómetro de la temporada de verano, dejó saldos más que positivos en Mar del Plata con más de 150 mil turistas.

La explosión turística del último fin de semana largo, que se sintió en muchos destinos del país, hizo que Mar del Plata recibiera la mayor cantidad de visitantes en lo que va de 2008. Con la recepción de más de 150 mil turistas, el día de la Inmaculada Concepción de María dio por tierra con los casi 130 mil que se habían acercado a la feliz el pasado 12 de octubre, rompiendo así el récord de la temporada baja.
De esta manera, un pequeño gesto de sonrisa se vislumbró en las caras de los prestadores de servicios turísticos marplatenses, que arrastraban una serie de contingencias que venían corroborando, cada vez con más fuerza, la temida hipótesis de una temporada de verano que haría aguas por varias hendiduras.
En declaraciones al matutino La Razón, el presidente de la Cámara de Restaurantes, Balnearios y Afines de Mar del Plata, Jorge Ricillo, deslizó que el 6, 7 y 8 de diciembre “fueron realmente muy buenos para la ciudad, no sólo por la cantidad de gente sino porque hubo, al menos en nuestro rubro, muchísimas consultas y reservas”.
El mismo medio indicó que la ocupación hotelera alcanzó, en el último fin de semana largo, casi el 100 por ciento en los hoteles de cinco estrellas, a la vez que llegó al 90 por ciento en los de categoría cuatro estrellas y al 80 en los de tres.

Dio sus frutos
El secretario de Turismo de la Provincia de Buenos Aires, Germán Pérez, ya había anticipado que este feriado iba a ser altamente positivo para la industria turística marplatense. “Estoy confiado en que el próximo fin de semana largo (por el pasado) se recupere el nivel de reservas de alojamiento, porque se despejó la incertidumbre de la gente respecto de los precios”.
En ediciones anteriores, este medio había reflejado la preocupación del entonces presidente del Consorcio de Municipios Turísticos de la Provincia de Buenos Aires (COTAB), Osvaldo Casalins, por la abundante propaganda que indicaba, “erróneamente” según el funcionario, que veranear en las costas de Brasil o Uruguay era mucho más barato y seguro que hacerlo en la costa atlántica argentina. Por ello el COTAB estaba realizando serias campañas de promoción para asegurase el gran contingente de turismo interno, una masa para nada desdeñable teniendo en cuenta que la afluencia de extranjeros disminuirá notablemente de acuerdo a la crisis financiera que ya explotó en los principales mercados emisores.
En esa misma línea trabajaba Germán Pérez cuando citaba, días previos al feriado nacional del 8 de diciembre, un relevamiento de la consultora Reporte Inmobiliario que indicaba que, a pesar de la devaluación del real, la costa atlántica sigue siendo más barata que Brasil. Apoyado en estos datos, Pérez estimó que “veranear en el sur de Brasil será un 35  por ciento más caro que hacerlo en las playas de la provincia”. “El traslado hacia las playas de Brasil incrementa fuertemente el costo final de una familia y las estadías todavía están por encima de las nuestras. Hay que ser responsables a la hora de echar a rodar especulaciones que tienen poco de rigurosas”, afirmó.

Precios razonables

La secretaría de Turismo de la Provincia de Buenos Aires, convocó la semana pasada a intendentes y entidades empresarias a una nueva reunión para “generar un espacio de consenso sobre precios razonables para la temporada de verano, apelando a mayor escala de la demanda y no al margen de rentabilidad”.
Estas reuniones sirven para llamar a la responsabilidad a empresarios y comerciantes de rubros ligados al turismo, pero fundamentalmente se hizo un pedido de racionalidad a los propietarios de inmuebles de alquiler, a través de los Colegios de Martilleros. El avance de estas gestiones fue calificado como “muy positivo” por Germán P&ea