A pesar de la garra que se le ha puesto a esta nueva edición de la Feria Internacional de Turismo, la crisis que vive el país y el mundo no ha pasado desapercibida en el predio de La Rural.
Pocos operadores mayoristas, muchos stands institucionales de generosas proporciones y destinos turísticos con más participación en metros pero con menos producción que en años anteriores.
La crisis estaba presente y nadie lo quería disimular.
Así y todo, las importantes bajas se suplieron con ingenio y a los ojos del visitante todo seguía igual.
Un buen ejemplo de esto fue el stand de Aerolíneas Argentinas y Austral, que hasta tres días antes de la inauguración de la feria no tenia resuelta su participación -por orden del Secretario de Transporte Ricardo Jaime- y que con mucha inventiva y buena voluntad el Departamento de Publicidad de la empresa logró armar un predio que no desentonó con el resto de los espacios de líneas aéreas.
En cuanto a los discursos, los dueños de casa, AAAVYT y AVIABUE, volvieron a manifestar su preocupación y dejaron oír sus reclamos ante los funcionarios nacionales y de la ciudad que estuvieron presentes en el estrado.
La búsqueda de una interlocución que dé respuestas, aunque muchas de ellas no son las que se quieren escuchar, es necesaria para saber cuál será el escenario que la industria deberá enfrentar en el futuro inmediato.
Sin embargo no debe acabar aquí la discusión. También hará falta un debate a puertas cerradas entre los propios dirigentes del sector para definir cuál debe ser su participación en ese futuro inmediato.
Es que si la FIT es el ámbito más importante para que la industria turística deje oír su voz, los dirigentes deberán gritar tan fuerte como sea necesario para que todo el sector privado entienda la necesidad de actuar corporativamente.
Agentes de viajes, hoteleros, prestadores de servicios, gastronómicos y todo aquel que esté vinculado de alguna manera con el sector, deben participar en la discusión que ayude a encontrar un equilibrio que beneficie a todos sus actores, porque si algo está claro en este contexto económico es que ninguno se podr&a