Tras la declaración de insolvencia, formulada por los directivos de Alitalia 10 días atrás, y el quiebre de la compañía, el Estado italiano se dispone a diseñar un nuevo plan de acción y gestión en la aerolínea que podría derivar en 4500 despidos, según expresó un medio gráfico del país gobernado por Silvio Berlusconi. Algunos sindicatos aeronáuticos ratificaron la cifra.
Se estima que los que más sufrirían esta ola de despidos serían los integrantes del personal en tierra, seguidos por los asistentes de vuelos.
Además de los 16 empresarios italianos que ya han puesto sus fichas por el nuevo proyecto, se prevé la intervención de un socio extranjero, que podría ser Lufthansa o Air France-KLM. Los medios ingleses hablan, además, del interés que tendría en ingresar como acciona