El viajero que exige calidad sabe que los parámetros que distinguen a las más importantes cadenas hoteleras internacionales se mantienen, sea cual sea el destino del mundo donde se encuentren. Pero muchas veces los destinos elegidos no cuentan con un gran hotel 5 estrellas, y eso no es motivo para resignar calidad de servicio, decoración, ubicación y hasta una atención personalizada.
Para estos viajeros han surgido en todo el mundo pequeños establecimientos de lujo que se denominan “boutique”, “de encanto”, “pequeños hoteles de lujo”, etc. donde lo primario es la atención de calidad premium. La variedad arquitectónica de estos establecimientos contempla desde edificios históricos que conservan todo el encanto de antaño, pasando por edificios súper modernos e inclusive alojamientos rurales.
El término hoteles boutique se originó en Europa, y fue utilizado para describir hoteles de entornos íntimos, generalmente lujosos o no convencionales y emplazados muchas veces en antiguas casas. Por tal motivo estos hoteles son usualmente más pequeños que los convencionales..
Algunos de ellos optan por sumarle el “plus” de ser un hotel temático: dedicado al tango, al arte, a la literatura, etc., con decoración y actividades alusivas al tema elegido.
Otros toman todo el provecho que les da el entorno, y así por ejemplo surgen los hoteles dentro de las bodegas, rodeados de viñedos y con una fuerte influencia del mundo del vino, con degustaciones de sus productos, enseñanza de cata y hasta Spas con derivados de las uvas y del vino.
Regiones turísticas como el Norte o la Patagonia se han visto beneficiadas con estos  emprendimientos incrementando la capacidad hotelera en destinos que tradicionalmente fueron relegados por no ser tan masivos.
La lista de establecimientos en Argentina es muy extensa por lo que nos limitaremos a mencionar sólo algunos de ellos, como ejemplo de la gran variedad de opciones disponibles para el viajero que busca, exclusividad, calidad y atenci&oac